SIN OJOS ABRIL 2015


 
SIN OJOS
"Elementos concernientes a posibles Visiones"
 No Ojos saluda en ustedes el Aliento del Gran Espíritu. Vivamos un momento de recogimiento antes que yo me exprese, un momento de silencio, también un momento receptivo.
 … Silencio…
 Antes de hablar y de intercambiar, imploro al Gran Espíritu de hacer que mis palabras sean para ustedes Evidencia y Verdad.
 Vengo por supuesto como Estrella Visión. Yo soy aquella que les ha hablado en numerosas ocasiones de la visión del corazón y de la visión sin ojos, de la visión etérica.  Les he  hablado de ciertas visiones posibles. No vengo para completar eso, sino a continuar de expresar un cierto número de elementos concernientes a esta visión.
La Visión de la que les hablo ahora, no es une visión que pueda ser descrita en términos inteligibles, porque esta Visión es lo que quizá ustedes llaman el Blanco de la desaparición o tal vez el Negro  del Absoluto. Poco importa. Esta Visión pone fin a todas las otras visiones.  Yo diría que esta Visión es la última, que sobreviene antes del final de la separación y el fin de la división. Esta Visión ahí, está más allá de toda causa y de toda explicación. Ella está más allá de la visión etérica, de la visión de los ojos, de la visión del corazón, si bien los ojos hoy llegan a percibirlo en su conciencia ordinaria.  Ustedes tienen, yo diría, destellos o momentos, y eso puede pasar en la naturaleza, en ustedes o por hermanos que ven desaparecer.
Desde el instante en que de alguna manera, ya sea por los ojos de carne, por los ojos sutiles, por la visión etérica, la visión del corazón, o por la visión directa, desde el instante en que el Blanco comienza a disolver toda forma y toda posibilidad de discernir o de discriminar lo que sea en el seno de ese Blanco, o por la desaparición de todo color, sabrán entonces que han llegado. Ustedes habrán llegado al lugar de donde nunca se movieron y que les parecerá volver.  Ahí está la cámara del Misterio. Allí donde se elaboran todas las otras visiones, donde se elaboran todas las vidas, todas las conciencias, todas las manifestaciones. Es la Fuente de todos los posibles y de todos los imposibles.
Ahí en esta Visión, no hay lugar para otra cosa que el Amor. Y está ligado desde luego, ya lo habrán comprendido, a la desaparición, a la disolución y a la Ascensión. Y esto es un signo de la Resurrección.  Y lo que firma también la Crucifixión a venir. Sean cuales sean los nombres y las percepciones que ustedes hayan vivido, o vivan ahora. Eso corresponde a lo que había sido llamado por el Comendador de los Ancianos: la Parrilla Planeta. Pero esta Parrilla Planeta, es solo la Parrilla de lo efímero, de lo que no tiene consistencia y lo que es superfluo.
Desde luego, a partir del momento en que el alma se invirtió, desde el momento en que el alma emprende un camino de disolución, aunque ustedes hagan idas y venidas, por sus dudas, o por movimientos naturales del alma, todo eso un día dejará el lugar al Blanco, cuando las formas y las manifestaciones desaparecen, y no queda más  que la pureza y la Belleza.
Ese es el lugar inicial y el lugar final. Es como diría el Cristo, el Alfa y la Omega; es la misma cosa. Es el momento en que no hay nada que ver, porque ya no es necesario. También el momento en que ya no hay ni visión del corazón, ni interior, ni visón etérica.  Es el momento que todo desaparece. También el momento del juramento y la Promesa, Y el momento del Llamado de María. El momento final de la Revelación.
Algunos de ustedes ya viven las primicias de diferentes maneras.  Ya sean éstas a través de los elementos, a través de sueños, desapareciendo, por la vibración o por que la conciencia se borra, todo eso los  lleva a lo esencial, porque más allá de esta ultima visión, yo diría, del Blanco y el Negro, hay mucho más que una convicción. Hay algo que es la Verdad, de la cual nada se puede decir, eso lo saben, y sin embargo se imprime en ustedes tan pronto como es vivida, esta vez no como una fe, sino como una certeza inquebrantable, porque entonces saben que todo viene de ahí y ahí todo vuelve, porque ustedes son eso.
Entonces, la desaparición de visiones, de ciertas manifestaciones, por momentos, por intermitencias, están ahí para acercarlos una vez más a la primera o a la ultima Visión, que no es propiamente una Visión, pero que en todo caso no permite discriminar, ni forma, ni emoción, ni dimensión, ni separación. Todo eso, ustedes lo viven como fue dicho, por momentos, quizás las primicias, o bien no las han visto.
Ustedes saben que están en un período a la vez de Ascensión, como también de Cara a Cara y de superposición. También es una oportunidad en esta última Visión, de vivir realmente la Eternidad. Y  es la experiencia de la Eternidad, la que pone fin a la ilusión. No porque combatan la ilusión o la comprendan, sino porque realmente la han trascendido, como lo dijo mi hermana Teresa. Esto pasa, por supuesto, que ya lo saben, por los cuatro Pilares del Corazón, la Unidad, por la Simplicidad, la Humildad, por la Responsabilidad también.
Ya sea el Blanco o el Negro, esto representa las dos vertientes de la Infinita Presencia o de la Última Presencia. Allí donde se manifiesta la Morada de Paz Suprema.  Donde se vive el Aliento del gran Espíritu. Es el Chispa inicial de toda creación que reenvía este Rayo también a su  Fuente inicial, porque allí es nuestra Morada, si bien diría que hay  numerosas Moradas, hay una sola Morada, todas las otras son solo manifestación de la Vida, de sus colores, y de sus infinitas posibilidades.
Es por eso que la Obra el Blanco los invita a cerrar el primer trabajo que fue la obra al Negro, en una terminología alquimista. El círculo se cierra, y finalmente han llegado al Aliento del Gran Espíritu, es decir, que han  completado el Alfa y la Omega, y que son coronados. Y allí, en el Blanco y el Negro, son alimentados, satisfechos y saciados, poniendo fin a toda  duda, toda interrogación, a toda explicación como a cualquier justificación de lo que Son. Y allí ustedes son libres.
Esta ùltima Visión no puede buscarse, ni crearse. Por otra parte existe efectivamente para la conciencia lo que llamaré dos vías, que podemos comparar con dos vías de paso.  Esto es una apariencia, a veces útil, para ustedes como referencia.  Pero en determinado momento será necesario aceptar perder toda referencia. Eso es trascender los elementos. Los elementos se fusionan, en cierta forma.  De la fusión de éstos renace el Éter, si prefieren el 5to. elemento, el que sostiene a todos los otros.
Ustedes están de alguna manera en el cruce de los caminos, y en el centro de la cruz. Les son abiertos todos los posibles, abiertos no para sus propias elecciones, sino para la desaparición de éstas, para la desaparición de toda visón, si bien en los próximos días fluctuarán, entre visiones inhabituales, y la desaparición de todas ellas.  Y esto será, como fue dicho, la finalización de la Obra al Blanco. El Alfa se une la Omega, sobre todo, el eje Atracción - Visón ha sido rectificado por la fuerza del Amor y del corazón y eso les da alegría, una Alegría que no depende de causa ni de ningún estado, porque como saben la Alergia en la manifestación espontánea del Amor, y de la Libertad.
Todos ustedes han emprendido y como todos nosotros, Estrellas como Melquisedec, emprendimos a veces caminos diferentes. A veces tenemos opiniones diferentes, pero todos convergiendo hacia la misma Verdad, la misma Eternidad y es ahí que se ve, de cierta manera, la coherencia del Aliento del Gran Espíritu en ustedes. No antes, porque necesitan, si quieren ser completamente libre, soltar todas las visiones, soltar todas las percepciones, todas las vibraciones. Tienen que desaparecer en algún momento. Aceptar esto ya es aceptar el Aliento del Gran Espíritu y la Verdad del Amor.
Desde luego, las visiones intermedias, de las que había hablado aquí hace muchos años, ya sea la visión etérica, la visión del corazón o de la visión interior, estaban solo destinadas a prepararlos para esto, no para alejarlos en escenarios o historias, sino para provocar en ustedes la certeza de la Verdad de la Luz, si bien para algunos de ustedes puede parecer todavía realmente distante, aunque así lo perciban, en realidad nunca ha estado tan cerca, incluso si conciben las cosas así.
Saben que el Aliento del Gran Espíritu, los riega constantemente. Las partículas ígneas que ustedes llaman Agni Deva están presentes en todas partes. Ustedes los sienten a través de sus Puertas, sus Estrellas, ellos pican, los penetran por todas partes. La Obra al Blanco finalmente se termina.
No sólo todo se ha cumplido en lo más alto de los Cielos, así como se cumplió más abajo de los cielos. Las visiones han sido un soporte, así como la Luz Vibral, porque la conciencia es eso. Pero la conciencia, ¿de dónde viene? Del Gran Espíritu, me dirán ustedes. Por supuesto, hasta un determinado espacio, hay todavía una distancia entre la Fuente y la Luz que ustedes Son. Pero en otro espacio ustedes son también la Fuente, en totalidad, aunque pueda parecer difícil de imaginar. Sepan que la percepción de la Luz Blanca es exactamente eso. Cuando ustedes desaparecen, cuando el escenario desaparece o alguien desaparece delante de ustedes, es que toca la Eternidad y el Amor. Y eso sorprende tanto que en el momento, ustedes no piensan en eso. Están todavía en la visión del Blanco y del Negro, no me refiero al negro de las tinieblas, me refiero al Negro de Luz Negra, la precede a la Luz Blanca.
 Cuando abordan a esta Luz Blanca, cuando ella los aborde (y lo mismo para el Negro), tendrán aquí los testigos de su desaparición, los últimos testimonios de su desaparición en las Moradas de Eternidad.
Además, si ustedes están aquí en estos momentos y si no son absorbidos por lo que ven, es decir, el Blanco o el Negro, ya sea por la desaparición de una persona, o la aparición de la Luz Blanca en un vórtice (como lo dijo el Comendador de los Ancianos), si son sensibles y están atentos ahí en ese momento, verán que al volver, sin importar la impresión dejada, estarán llenos de Amor y de Alegría, incluso si no saben las palabras exactas para decir lo que experimentan; eso no es necesario, ya que está inscrito en lo que ustedes son. Todo esto se lleva a cabo en este momento, todo esta ahí.  Aceptar de ver la Verdad, aceptar vivir la Eternidad  los desincrusta por completo de la materialidad de este mundo, pero no de la Vida.
Por supuesto, si eso les llegó mucho antes de este tiempo, puede ser que tengan nostalgia de lo vivido. A veces se tiene la sensación de pérdida, pero todo es pasado ahora porque el Blanco está ahí, la Obra al Negro se une a la obra al Blanco. Así se cierra el círculo, como yo diría.  Se termina el sufrimiento y la ignorancia, termina todo lo que es superfluo e innecesario dejando sólo lo esencial, el Soplo del Gran Espíritu. 
Entonces, ¿qué es lo que todavía puede impedirles vivir esto si aun no han experimentado? Por supuesto que eso fue llamado resistencia, pero esta resistencia no siempre es el hecho de su persona, porque incluso si las líneas de depredación fueron suprimidas de la tierra, quedan lo que yo llamaría recuerdos y remanentes de estas líneas de depredación, sobre todo porque las formas que crearon estas líneas depredadoras, están siempre presentes, si bien no están activas gracias a la Luz Blanca. Ellas pueden causar fenómenos de memoria en ustedes, que son responsables de sus dudas, sus preguntas y también de sus sufrimientos. Pero tan pronto como la Luz Blanca es vista, de una manera u otra, les puedo asegurar que todo esto se está realizando en la tierra.
Así María intervendrá, en la frontera del Blanco y del Negro, sin visión pero con evidencia, en un reconocimiento total y mucho más importante, si puedo decir, que les experiencias que hayan podido vivir hasta el presente. Parque ustedes saben o sabrán lo que es María y el hecho de saberlo, no está ligado a otra cosa que la Reconexión a nuestra Madre común. Es la fusión de los elementos, lo que permite eso. Es para eso que en la tradición de mi pueblo, antes de cualquier ceremonia, hacíamos el llamado a las cuatro Orientaciones, a los cuatro Elementos. El tambor y el fuego, así como la manta, estaban dirigidos hacia las cuatro Orientaciones.
Es una ceremonia que permite dar gracias a los Cuatro Vivientes, que son los Servidores de la Fuente Una, capaces de desplegarse en todo el mundo, en toda circunstancia y en toda dimensión. Esto es exactamente el caso para ustedes, a través de lo que los Ancianos llamaron el despliegue del vehículo Dimensional, a través de lo que el Maestro oriental  Li Shen les dio a través la danza del Silencio. Todo ello unido a la fusión de los cuatro Elementos. Esta es la Obra al Blanco, el fin de la Obra al Blanco, es el Alfa y la Omega reunidos, en el centro de la Cruz.
 ... Silencio ...
 No Ojos comulga con cada uno, como cada uno de ustedes comulga con cada uno.
 … Silencio…
No Ojos se retira ahora en ustedes.