NO OJOS
“El rol del Elemento
Agua”
No Ojos saluda en ustedes la Flama eterna de vuestra Presencia. Instalémonos
juntos si lo quieren bien, antes de que comience a expresarme, enviada por
María, a fin de darles un cierto número de elementos que quizá conocen,
concernientes al agua de la tierra.
Pero por mi lugar como Estrella
Visión, vengo a conectar en ustedes los elementos concernientes al agua y a su
rol en todas las vidas y en este mundo. Antes que nada instalémonos juntos con
el Soplo del Gran Espíritu.
...Silencio...
Vengo a expresar, por mi posición en proximidad del agua y de la tierra.
Vengo a darles algunos elementos correspondientes a la modificación del agua de
la tierra. Para esto, nos hace falta ahora precisar y especificar lo que es el
agua en todas las creaciones y todas las tierras.
El agua es la matriz de vida, el agua lleva la vida, el agua siembra la
vida, el agua permite la creación a nivel de los mundos carbonados. El agua
está vinculada, por supuesto a la visión y a la tierra y al agua como
arquetipo. Las aguas de abajo son las aguas de la manifestación, las aguas de
la matriz y luego las aguas donde se imprime la creación.
El agua es el primer cristal de la Creación. Es un cristal líquido
portando en el la capacidad de registrar y de entregar un cierto número de
elementos de conocimiento vinculados a la matriz astral pero también vinculados
a la transcendencia de la matriz astral y luego a la Tierra.
El agua es también, si puedo decir, un fuego líquido permitiendo la
cristalización de la vida y permitiendo también desarrollar la vida en una
dimensión dada. El agua posee las características evidentes, ella fluye y se
propaga, ella infiltra todo, ella está al corriente de todo. El agua a menudo
está presente como superficie de reflexión, propia a la clarividencia y a la
anticipación.
Las formas del agua son profundamente diferentes sobre la tierra, como
en los cuerpos carbonados.
El agua es el vector de la vida pero es también el agente transformador
de la vida permitiendo su re-creación, permitiendo su purificación. Así es el
Agua del Bautismo, así es para nosotros, gentes nativas, los ritos del agua,
permitiendo allí también purificar, limpiar y sobre todo elevar.
El agua es un médium, es el médium que deja ver más allá de las
apariencias y que deja ver más allá de la vida ordinaria. El agua es también el
vector de lo que he expresado hace muchos años, concerniente a la visión del
corazón, la visión etérica y la visión corta, no dependiendo de ninguna visión,
de ninguna clarividencia sino siendo la Evidencia del agua como matriz de vida
en la cual se imprimen todas las energías, todas las formas.
El agua es lo que permite a la vez recubrir, expandir, superar y
transcender los límites impuestos por la tierra por sus capacidades de
infiltración pero también por sus capacidades de evaporación. El agua puede
presentarse, por supuesto y lo saben, bajo diferentes formas, desde el estado
el más próximo de la tierra, al estado el más “aérico” en lo que concierne al
vapor y a la evaporación.
El agua está vinculada al Misterio de la Vida porque la fuente de la
vida en el mundo carbonado se encuentra en su nivel. Las gentes del agua sobre
esta tierra, como en toda tierra carbonada, son las gentes que no están
privadas, como puede serlo el humano en su mundo disociado, ellas no están
privadas de la clara visión y de la visión.
El agua está vinculada por supuesto, a lo que ustedes llaman también
sobre la tierra las emociones y que nosotros las gentes nativas llamamos los
“enganches” y los “anclajes” también a las memorias pasadas. El agua está
vinculada a los recuerdos, el agua es recuerdo, el agua es también matriz. Ella
es también el elemento que va a permitir fluidificar y unificar el conjunto de
los elementos. El agua es el fuego líquido, el agua es el fuego condensado bajo
una forma diferente de la del fuego. El agua no quema si ella no está caliente,
pero el agua puede quemar, el agua puede enfriar, el agua puede escaparse por
lo bajo o por lo alto. El agua es plástica, ella es movible. Ella es una
superficie de reflexión, ella es una superficie de meditación. Ella es también
lo que permite transmitir la vida y transmitir el Amor.
Los ritos del agua son innumerables sobre la tierra en todas las gentes
y en todas las tradiciones. El agua ha sido utilizada tanto para el bautismo
que en las ceremonias particulares, que esto sea entre nosotros bajo su forma
de calor en las cabañas de sudación, que esto sea el agua absorbida, soporte y
médium de ciertas plantas permitiendo vivir los estados que ustedes llaman
“expansión de consciencia” y que nosotros los nativos, llamamos: “estados
naturales” .
El agua es el receptor perfecto de la información de la vida. El agua es
el elemento más plástico y el mas permanente de los elementos en los mundos
carbonados. El agua está constituida también de gas, antes incluso, ella misma,
de volverse un gas. El agua es pues a la vez el aire, a la vez el fuego, y en
parte la tierra.
En el rol atribuido a Isis o María, el agua es atribuida a la feminidad
y a la creatividad. Esta creatividad está vinculada a su plasticidad, a su
capacidad para casarse con todo recipiente, toda forma y todo contenido. El
agua da vida y nutre, por los cursos de agua, por los arroyos, ríos y océanos,
la vida que ella alberga pero también la vida vegetal en el interior como en el
exterior.
El agua está omnipresente en los cuerpos carbonados, ella representa una
gran parte. Esto hoy, en este mundo, todo el mundo lo sabe. Pero el agua es más
que esto, ella tiene los aspectos místicos, los aspectos de regeneración, los
aspectos que permiten conectarse con el Gran Espíritu. Así son un cierto número
de ritmos y de ritos aplicados entre todos los pueblos de la tierra.
El agua porta y soporta la vida y yo diría incluso que el agua realiza
la vida en el seno de los mundos carbonados, hacia un estado vibral mas grande
y más vasto. El agua permite pues todos los movimientos, hacia lo alto, hacia
lo bajo, hacia el interior como hacia el exterior. El agua viene a restaurar la
vida de los afectos, la vida produciéndose en muchas enfermedades. El agua es
el soporte de vida y el agua es el soporte que agencia la vida y la pone en
armonía y coherencia con las leyes del Cielo y de la Gracia. El agua es pues a
su turno un Don de la Gracia porque el agua puede guardar lo que quieran y
puede a su turno retransmitir, idéntica a la intención de partida o idéntica a
la programación o a la intención que es depositada.
Muchos buscadores sobre la tierra, en vuestro mundo occidental, están
interesados en el agua y han encontrado las cosas que nosotros conocíamos de
manera ancestral. La ceremonia del agua es algo que era practicado por mi
pueblo porque la ofrenda del agua es la ofrenda a la naturaleza del elemento el
más femenino, el mar maternal y el ma Liberante al mismo tiempo. Existen muchas
ceremonias del agua.
El agua resuena de manera uniforme sobre el conjunto de la tierra. El agua
sobre la tierra es el receptáculo completo de la Luz vibral, de la vibración y
de la energía. El agua es un soporte de vibración y de resonancia y de
elevación así como de disolución.
El agua corresponde también a lo que hemos llamado hace algún tiempo, la
actualización del Femenino sagrado que corresponde a la co-creación consciente
y a la actualización en la matriz de la Verdad. Existen múltiples formas de
celebrar el agua. Ustedes conocen algunas. Una de esta formas ha sido dada por
los movimientos del maestro chino Li Shen. Muchos guerreros conocían las
virtudes del agua y sus capacidades de adaptación y de corrección de toda
situación y para toda situación.
Vivir el elemento del agua disuelve las resistencias. El agua va a
permitir lavar, no solamente el cuerpo sino también las emociones. El agua
absorbe y el agua emite. Ella emite muchas cosas: ella emite por supuesto la
Luz, ella emite también los protones, ella emite pues la materia y la Luz. Ella
está constituida, recuérdenlo de elementos del aire y de elementos del fuego.
Una tierra sin agua, en un mundo carbonado solo puede vivir y
transformarse difícilmente.
El Espíritu Santo es también un agua, pero un agua del cielo, dejaré
para esto al Arcángel Anaël expresar lo que es esta agua del cielo. El agua no
almacena solamente la información y las memorias, el agua es un soporte que va
también a emitir, y que va a agenciar y organizar la Creación. La emoción, las
emociones por supuesto también están vinculadas al agua (pero no solamente)
ellas toman su apoyo, su crecimiento y su manifestación. El agua es la vida
ella-misma en los mundos carbonados.
El agua está siempre en movimiento, incluso el agua estancada en el
fondo de un mar está en movimiento, incluso si este movimiento no les aparece
como una circulación en un río. El agua no detiene nunca su movimiento salvo
cuando ella está congelada donde entonces, la información está fija. Cuando el
agua calienta, entonces ella libera su información, el calor aplicado al agua
por el fuego, por el aire y por la tierra la vuelven a su vez ígnea y caliente
y movible. El agua disuelve, no solamente las toxinas, no solamente lo que está
fijo, sino que el agua también transforma, el agua despierta a o que está del
otro lado del espejo.
La activación del elemento agua en ustedes se traduce en este momento
por un calentamiento del agua de vuestro propio cuerpo, como un calentamiento
de las aguas de la tierra. Estas aguas son calentadas de diferentes formas: a
la vez por los volcanes, a la vez por el sol y a la vez por ustedes mismos. El
agua que calienta vibra mas largamente y más ampliamente. El agua abre las
puertas. En el ser humano, el agua que fluye permite el nacimiento de un nuevo
cuerpo humano. El agua es pues el soporte de la vida adaptada a este mundo. El
agua es también lo que va a conectar y a liberar.
Pero por supuesto, como lo he dicho,
existen muchas aguas con tantas diferencias que puedan existir entre el agua
sucia y el agua del océano. El agua es pues plástica, flexible y adaptable.
El agua de la tierra durante mucho tiempo fue privada del agua del cielo
pero después de la liberación de la tierra, el agua del cielo encuentra
nuevamente al agua de la tierra. Las aguas de lo alto y las aguas de lo bajo
que se reúnen, ponen fin a la ilusión y al ajetreo y bullicio. El agua es el
agente del pasaje o transición, del último pasaje porque esta agua allí reunida
con el agua del cielo, es el agua del Bautismo, no el de vuestro nacimiento en
este mundo sino el de vuestra Resurrección.
El agua es el agente omnipresente, en vuestro cuerpo como en vuestra
consciencia. Ella es la matriz de vida, ella es el origen de la vida, ella es
la manifestación de la vida, ella es la encarnación de la vida y ella es la
liberación de la vida en este mundo.
Tal vez han tenido la oportunidad de leer o de oír hablar que en
numerosas tradiciones ha sido informado de una inundación mayor sobre la
tierra, sobreviniendo durante el tiempo de aquel que fue llamado Noé. Pero esto
está presente también en mi pueblo y en todo pueblo nativo, dondequiera que
sea, ha mantenido esta confianza hacia el Eterno femenino, hacia el Femenino
Sagrado.
El agua del cielo está vías de unirse al agua de la tierra, poniendo fin
al misterio de la vida aquí abajo. El agua es el agente que va a favorecer
dentro de muy poco tiempo, la superposición y la adecuación de lo efímero y de
lo Eterno. El agua y el fuego unidos disolverán lo que está obsoleto y lo que
viola la libertad.
El agua les da a ver, el agua sacia, el agua es transparente y en esta
transparencia, ella esconde lo que ella contiene, no porque ella lo ha
decidido, sino precisamente porque el agua del cielo no está allí
El encuentro de las aguas del cielo y de la tierra está en curso, el
fuego exulta por todas partes sobre la tierra para acoger el agua del cielo,
poniendo fin al misterio de la ilusión. En ustedes también el agua se
despierta, permitiendo vivir lo que expliqué hace algunos años, concerniente a
la visión y a las diferentes formas de visión. Esta visión no es solamente visual,
ella es una visión mucho más lúcida y mucho más elevada que simplemente el
aspecto visual y material de este mundo.
El agua da pues acceso a lo que
ustedes, occidentales, llaman arquetipos. El agua de la fecundación se
encuentra también por todas partes en el mundo entre los pueblos nativos.
¿Qué sucede en el agua de la tierra? Ella ha sido manchada, en sus
océanos, en sus corrientes, en sus ríos pero también en vuestro cuerpo. El agua
ha sido alterada. Además de ser privada del agua del cielo, ella se ha
encontrado a transmitir, a su pesar, las informaciones erróneas, a transportar
los venenos, a su pesar, hasta lo más íntimo de vuestro cuerpo y de vuestra
consciencia.
Todo esto va a revelarse y a
manifestarse a ustedes cuando el agua del cielo se fusione con el agua de la
tierra. Esto está en curso, porque esto se les ha sido explicado y lo viven
algunos de ustedes. Los Triángulos elementales se reúnen en la quintaesencia de
los elementos encima de la punta, a nivel de lo que ustedes llaman la Pequeña
Corona de la cabeza.
De este encuentro entre el principio del elemento agua y el Triángulo
del agua que representa a nivel de vuestra cabeza, la fusión del agua del cielo
y de la tierra les dará a vivir lo que llamaría, sin entrar en detalles: la
Evidencia. La Evidencia que va más allá de las palabras, del juicio, de la
reflexión, de la comprensión. Es la Evidencia del Eterno femenino, del Femenino
sagrado, de la creación eterna.
La transformación del agua que se vive en este momento se hará gracias
al agua del cielo y permitirá lavar las lesiones de la suciedad del agua, de la
suciedad de las emociones, encerrada aquí mismo en esta tierra, dándoles a
vivir la emoción libre, la que no está ni condicionada, ni derivada de una
experiencia sino que está totalmente libre en su manifestación, en su
vibración, en su irradiación y en su calidad. El agua ha sido reducida sobre la
tierra, mucho más allá de la separación de las aguas del cielo y de la tierra,
el agua de la tierra ha sido manchada como lo he dicho, pero ha sido
transformada, limitando por lo mismo sus capacidades de memoria y sus
capacidades de donación de la misma forma que el femenino ha sido manchado
sobre la tierra por la élite patriarcal.
Pero el agua recobra hoy su libertad en su quintaesencia y en su
principio. Esto se traduce en ustedes por un fuego o por un apaciguamiento. Sea
hay que quemar ciertas cosas, sea hay que calmar y solo para aplicar un bálsamo
reparador. Allí está el rol del agua del cielo y de la tierra finalmente
reunidos de nuevo.
La fuente se refleja ella misma, el Espíritu se refleja el mismo en la
superficie del agua. Por otra parte, esto está inscrito en las palabras de la
biblia. Las aguas de lo bajo y las aguas de la tierra son las aguas de la
manifestación, sucias aquí en este mundo, manchadas aquí en este mundo Así, el
agua ella misma va a venir a lavar la tierra como ella va a lavar o a disolver
nuestra alma si no está ya hecho por el Fuego celeste y el Fuego del Amor.
El agua es de alguna manera la concretización del Amor en este mundo.
Incluso alterado y manchado. Ella guarda en ella la memoria eterna de su propia
creación y de vuestra creación como sistema carbonado. El agua remite al hombre
y ella remite al alma. Ella es el médium que permite, antes de la alteración y la
suciedad, de conectar loa planos de lo más denso a lo más elevado.
El Triángulo del agua está
directamente conectado al agua de lo bajo pero también al agua de lo alto.
El encuentro del agua de lo alto y el agua de lo bajo se hace por la
Llamada de María, es lo que será el agente transformador de la tierra por el
agua y por el fuego. El agua es la paz, el agua es el bálsamo que es aplicado
sobre el alma o sobre el cuerpo, que permite realmente lavar lo que es visible,
como lo que estaba invisible.
La hora del agua va a sonar muy pronto, provocando así el lavado de la
tierra y su limpieza, activando así su propia transcendencia. El agua es
también el silencio y la paz de lo que transcurre sin trabas en un murmullo que
a veces entienden, como ante una cascada, como ante el océano.
El agua puede circular en un sentido pero también en los dos sentidos
con las idas y venidas del agua tales que son visibles al borde del océano. El
agua siempre va en el mismo sentido a lo largo de los ríos y arroyos pero
cuando el agua del cielo encuentre al agua de la tierra, no será ya lo mismo
porque el agua recubrirá la tierra, porque el agua se conjugará con el fuego
para realizar la última etapa de vuestra Ascensión en el momento de vuestra
Resurrección.
Todo lo que ha sido oculto sobre el agua aparecerá muy pronto claramente
y en toda transparencia. No olviden nunca en estos tiempos de tener a vuestro
lado una agua pura que esta agua bañe en vuestra aura antes de ser consumida a
fin de hacerla resonar y de llamar al agua de lo alto, a fin de unirse la
quintaesencia del agua: el Femenino sagrado, y apaciguar la co-creación
consciente, apaciguando las anomalías vinculadas a las heridas de esta
co-creación consciente.
Estas heridas de vuestro pasado, de
la historia de la tierra, del sufrimiento del agua, del sufrimiento de lo
femenino están inscritas por supuesto en todas las hermanas, como en todos los
hermanos.
El agua de la tierra tiene sed del agua del cielo. Ella también quiere
reunirse con su fuente y con su Eternidad. El agua ella también, a su manera,
se prepara para su Liberación. Por otra parte, algunos de sus habitantes están
en vías de reunirse a sus moradas de Eternidad y abandonan la tierra ya desde
hace algunos años. Los animales del agua son los primeros a estar sensibles a
la llegada del agua del cielo pero también a las suciedades y a las poluciones
del agua. El Pueblo del agua es pues el primero de dejar la tierra, no como un
castigo sino más bien como una sed de libertad de evolucionar en el agua del
cielo y no solamente en el nivel del agua de la tierra.
El rol de los pueblos del agua se
termina pues: ellos han sido los guardianes a fin de evitar que el agua no
desapareciera y que no pudiera ya nunca regresar el agua del cielo.
En estos tiempos, ustedes están también invitados a celebrar el agua, la
de vuestro cuerpo, así como el elemento mismo “agua”. Es en este sentido que el
Maestro Li Shen les ha comunicado hoy este último elemento, ante el fuego.
Puede ustedes pedir al agua de la tierra hoy lo que quieran para
ustedes, para vuestros prójimos. Pueden pedir al agua como pedirían a un árbol,
como lo dijo mi hermana Snow. Hay en el agua una capacidad de regeneración
importante y una sensibilidad extrema a vuestros estados de humor y a vuestros
pensamientos. El agua puede también estabilizarlos a fin de evitar que las
lágrimas dejen de correr, a fin de evitar que el alma no se seque sin por lo
tanto desaparecer.
Mis palabras van a devenir ahora
cada vez más espaciadas porque he entregado el conjunto de las palabras que
debía entregar y para dejar el lugar al agua del cielo.
Ahora en los espacios de silencio,
el despliegue del agua y las primicias del agua del cielo los penetrarán. El
agua de lo bajo acoge al agua de lo alto a fin de que el agua de lo bajo se una
al agua de lo alto, es lo mismo para ustedes en vuestra Resurrección y en
vuestra Ascensión.
Pueden pues pedir al agua, y beberla, pueden llamar la memoria del agua
antes de beberla, no la memoria de sus suciedades sino más bien la memoria de
su origen, la memoria de la Creación sí como la memoria de la Eternidad que no
depende de ninguna creación. Todo esto está presente en el agua, incluso sucia,
incluso alterada.
El agua de lo bajo y el agua de lo
alto, re-fusionándose, develan al Espíritu, el Espíritu de Verdad y el Espíritu
del Sol. El agua de lo bajo se regenera en este momento como el agua de vuestro
cuerpo se transforma bajo la acción de la Luz, bajo la acción del Fuego vibral.
El agua permite extinguir el incendio del Fuego vibral encontrando al carbono
de vuestra carne. El agua devendrá para ustedes, no ya simplemente una fuente
de vida sino más bien, un despertar de la vida eterna, si esto no es aún el caso.
Entonces miren esta agua a vuestro lado antes de beberla, y tomen un
agua sin minerales, un agua que sacarán de los contenedores artificiales para
ponerla en la tierra, es decir en una jarra. Esta agua puede ser vivificada por
supuesto por el Espíritu del Sol directamente, solarizándola, exponiéndola al
sol de la mañana o del mediodía. El agua debe estar también almacenada a
vuestro lado, a fin de impregnarse de ustedes, a fin de impregnarse de lo que
resta de resistencia en ustedes, dándoles, mientras la beben, un bálsamo que
apaciguará lo que pueda resistir y sufrir en ustedes.
Y cuando laven vuestro cuerpo, no
olviden de pedir al agua lavar también lo que no ven y que perciben. Pidan al
agua que lava vuestro cuerpo de lavar también el conjunto de vuestros cuerpos
sutiles.
El elemento agua es el que es más
sensible a vuestro estado de ánimo pero también a vuestras peticiones. La
restauración del Femenino sagrado pasa también por el Androginato del agua,
cuando el agua del cielo se une al agua de la tierra, porque el agua les
aparecerá siempre en forma de agua, que ella esté contaminada o que ella esté
limpia, pero a menudo sigue siendo transparente. Pero cuando el agua del cielo
se una al agua de la tierra, su acción entonces es multiplicada. El elemento agua
es el que el humano hoy sobre la tierra puede modificar más fácilmente, por la
petición y por el pensamiento pero también por la resonancia, si el agua está
almacenada a vuestro lado y es solarizada antes o después, de absorberla.
Muchos de ustedes, como anunció el Comendador de los Ancianos, han
comenzado a percibir al pueblo del agua que era el que se escondía más del ser
humano, porque las gentes del agua, sutiles, ellos que no estaban encarnados en
los cuerpos de carne pero que evolucionan en esta dimensión. Quiero hablarles
de los elementales del agua, quienes hicieron un trabajo enorme para mantener
la integridad del agua cualesquiera que sean sus suelos.
El agua del cielo, Anaël les hablará, pero puedo ya decirles que lo que
llaman ustedes el agua del cielo se encuentra en la alusión que fue dada
durante el tiempo donde Sri Aurobindo, otro Anciano, Maestro del Aire, fue San
Juan. Cuando él escribió que “El ser humano vería sus vestiduras lavadas en la
sangre del cordero”, él no hablaba del sacrificio del Cristo sino más bien de
la Resurrección pascual y por supuesto de vuestra Resurrección, ya que lavando
vuestras vestiduras en la sangre del cordero, reciben el Bautismo del cielo y
el adumbramiento de María. No ya solamente su Presencia en vuestro Canal
Marial, no ya solamente su Presencia en vuestro corazón sino también su Manto,
el de la compasión de color azul, recordándoles la Obra al Azul tal como fue
expresada por Sri Aurobindo y que fue previa a la Obra al Blanco.
Hoy, han recuperado vuestro Femenino sagrado, van todos a hacer frente a
la suciedad de la vida. Esto aporta la prueba de que nunca lo que mancha lo
femenino puede establecerse en la Eternidad.
El agua original será restituida en el momento de vuestra Resurrección
de manera evidente, casi en sincronicidad con la Llamada de María. El agua no
les pide nada más que acogerla, el agua de lo alto como el agua de lo bajo, el
agua del cielo y el agua de la tierra unidas en la misma resonancia en vuestras
envolturas sutiles, como en vuestro cuerpo de Eternidad.
El agua, finalmente, contiene el Soplo del Espíritu en su polaridad
femenina y el agua de lo alto toma su fuente en Sirius. El agua de lo alto
acoge al Espíritu en totalidad, el agua de la tierra va pues a ponerse en
conformidad con la Ley del cielo. El agua es la encarnación de la Gracia. El
agua de hoy, ya sobre esta tierra, como la de vuestro cuerpo, los llama a la
Resurrección y a vuestra desaparición de la ilusión. Es esto lo que viven y que
será realizado cuando el agua del cielo se una definitivamente al agua de la
tierra.
Vayan también y esto había sido también explicado por mi Hermana Nieve,
vayan a caminar a lo largo de una corriente de agua, vayan a remojar vuestros
pies, háganse lavar los pies por un hermano o una hermana. Lavar los pies
permite liberar la Onda de Vida, ahora, puesto que el agua del cielo llega. El
agua los invita a la celebración, al lavado y a la purificación. Que la
absorban o que la utilicen, lo que algunos pueblos antiguos hacían, esto tendrá
las mismas virtudes.
En los tiempos del Cristo y antes de El, algunos han bautizado en el
agua, el agua corriendo sobre la cabeza. Ustedes también pueden realizar esto:
Laven los pies y acojan el agua en la parte superior de vuestro cráneo, esto
creará en ustedes una alineación inquebrantable, sin ninguna posibilidad de ser
quebrantada o desestabilizada.
Cuando utilicen el agua, para cualquier uso que sea, den también
gracias. Que esto sea para regar vuestras flores, que esto sea para lavar
vuestro suelo, no olviden que es la misma agua que recorre vuestro cuerpo.
Cuando se laven las manos, honren el agua y constatarán muy pronto que no lavan
solamente las manos sino que también lavan muchas otras cosas en las envolturas
del cuerpo emocional, y del cuerpo mental. De la misma manera que pueden
también no lavarse como lo hacen habitualmente, sino aplicar el agua sobre
vuestra frente de una sien a la otra y verán cómo reacciona el elemento fuego.
Por supuesto será necesario usar un agua pura, no sucia, es decir sin minerales
y sin tierra en el interior, pero sobre todo un agua que ha sido bañada por
vuestra irradiación estando próxima a ustedes y un agua que ha tomado el sol.
La magia del agua les es abierta nuevamente porque el agua del cielo está
próxima. Hagan la prueba, ensayen por ustedes mismos, no crean lo que les digo,
verifíquenlo.
...Silencio...
No Ojos les saluda y les rinde
gracia a vuestra escucha. Hasta pronto.