MARÍA MARZO DE 2015

 
MARÍA

La Hora de la Llamada

Yo soy María, Reina de los Cielos y de la Tierra.
Hijos bien amados, los cubro con mi Amor, a ustedes que son sin excepción la carne de mi carne, mucho más allá de las leyes de la carne, pero en las leyes del Cielo. La Ley del Cielo que es Amor y en mi polaridad Misericordia y Maternidad.

La hora de la Llamada se apremian a vuestra conciencia, dándoles a vivir las primicias, los escalofríos y a veces la aprehensión. Para otros entre ustedes, esto los eleva ya en un éxtasis sin nombre, allí donde no hay nada más que lo que ustedes son, sin ninguna otra manifestación que la del Amor. En esto, ustedes lo saben, lo presienten. Entonces, por supuesto mi Hijo dijo; “Nadie conoce ni la hora ni el día”. Y sin embargo sobre vuestra ruta, sobre vuestro camino, en este mundo, las señales son innumerables alrededor de ustedes. Por supuesto, muchos de mis hijos duermen aún presos en las redes de la ilusión. Pero solo habrá un tiempo y este tiempo llega a su fin.

Mis Gracias van a ser innumerables para el conjunto de mis hijos, en estos tiempos tan precisos y tan intensos. Nadie dejará de reconocerme, nadie podrá negarme o hacerse a un lado de mi Llamada. Entonces, por supuesto, cada uno de ustedes vivirá en su propia forma lo que hay que vivir. Para el momento, les recuerdo que el mejor de los preparativos no es mirar vuestra historia, vuestros sufrimientos, vuestros dolores, ni escuchar lo que les dicen vuestros pensamientos, lo que les dicen vuestras emociones. No escuchar ya no lo que dicen vuestros placeres o vuestras penas sino más bien permanecer lo más próximo de vuestro corazón, en todo acto, en todo gesto, en toda situación. No lo olviden nunca.

Vuestra vida, en este período, se santifica y se eleva, cualesquiera que sean las apariencias. Lo que se desarrolla solo es el abandono de los últimos pesos, de las últimas barreras, de los últimos elementos del juego de este mundo, a fin de volverse virgen y nuevo en vuestra Eternidad y en vuestra Paz. Muchos de ustedes viven y vivirán las señales particulares en el interior de vuestros días, en el interior de hechos a veces insignificantes de vuestros días. Todo esto solo les mostrará, si esto es aún necesario, la Inteligencia de la Luz, la Inteligencia del Amor y también la Inteligencia de toda Madre en todo el mundo. Estén sin preocupación, estén sin esperanza y sin espera, estén simplemente presentes en la dulzura del instante y en su plenitud.

Ocúpense lo mejor que puedan, según lo que la vida les dé y les ofrezca, a vivir cada momento de vuestra vida en un estado de paz, lo que sea que los cruce, en contra de las andanzas del estado de ánimo, de las andanzas de las emociones, de las andanzas del pasado. Ustedes no son esto y lo serán cada vez menos. Entonces, a veces esto puede darles la sensación de que no hay nada a aferrarse, dando a veces el sentimiento que hay cosas que desaparecen, que no están ya presentes como antes, en ustedes como en este mundo.

Los componentes del conjunto de las conciencias se modifican. Los intereses o los desintereses repentinos se manifiestan y solo están allí para permitir, a cada uno, según vuestra manera de adaptarse lo más justo a lo que viene hacia ustedes, y que está ya allí para muchos de ustedes, por vuestro estado, por vuestra paz que es allí lo que deviene vuestra vida, vuestro cuerpo, vuestros afectos, vuestros amores.


El Amor toma la delantera de la escena y les muestra donde está el Amor y allí donde no aún no está, no para juzgar o condenar sino para ver lo que se desarrolla, no para participar. Que esto sea vuestra historia o un evento que se desarrolle ahora, todo esto no es nada porque la Paz les pide una sola cosa: Ser aún más Amor.


Sabemos por supuesto, y sobre todo en vuestra época que las vicisitudes de este mundo, las reglas, las limitaciones, inducen muchos más sentimientos de fracaso, de tensiones que anteriormente. Sin embargo, les recuerdo, que están en vuestro justo lugar en este momento preciso, cualquiera que sea la edad, cualquiera que sea la historia ya que no son nada de todo esto. La vida va a mostrarles, cada vez más, allí donde está vuestra verdad y allí donde no hay Amor y todo esto que parezca contrario al Amor solo es la resolución en los espacios del Amor incondicional. Esto no aparece necesariamente en el momento pero se manifiesta, yo diría, cada vez más lucidamente en ustedes. De alguna forma como si el examen de conciencia que acompaña la muerte, de un ser humano sobre esta tierra, les pasara vivos, en este momento, como si muchas cosas se revelaran a ustedes, vivida a veces como las espinas, vividas a veces como las alegrías. Pero esto no hace ninguna diferencia ya que solo los cruza y les revela al Amor.

Pues conténtense de observar sin explicar, sin juzgar, sin condenar, y sin glorificar ya lo que esto sea o a quien sea. Permanezcan sensibles al Amor e insensibles a lo que no lo es, no para rechazarlo sino para dejar aflorar precisamente este Amor. Bendíganlo de la misma forma, bendigan las situaciones, bendigan las relaciones, bendigan vuestra historia porque todo es devuelto y perdonado en este momento mismo. Les corresponde soltar lo que pueda cruzar en este período, y que comienzan a ver cada vez más claramente en algunos comportamientos, en ciertas infracciones, en ciertos excesos o en ciertas distorsiones. Todo esto no es grave. Es como los pequeños toques que les son dados contribuyendo a vuestro avance hacia el corazón del Corazón, hacia el Pasaje, hacia mi Llamada y la Resurrección.

Todo esto, de manera a veces un poco confusa, va a aparecerles cada vez más claramente. Que esto sea en vuestros sueños, que esto sea en vuestros días, que esto sea en las experiencias innombrables que pueden vivir en el seno de un día, en cualquier evento que sea, en vuestro cuerpo también, que se manifiesta a veces de manera violenta y no duran en todo lugar de vuestro cuerpo, dando a veces percepciones no habituales, que esto sea percepciones corporales o incluso, yo diría, en el análisis de una situación que viven en el momento donde la están viviendo. Porque lo nuevo comienza a hacer desaparecer lo antiguo y lo nuevo no tiene límite ni restricción. Lo nuevo es Libertad, y esto puede a veces contrastar con el encerramiento, que viven.

Entonces por supuesto esto puede a veces ser desestabilizante pero toda nueva desestabilización los conducirá innegablemente a un nuevo equilibrio que hará de lo nuevo equilibrio, hasta lo Último, lo más evidente para mi Llamada. Yo diría que la única cosa a verificar está en ustedes, en vuestra conformidad para el Amor, no tal como puedan imaginarlo o suponerlo sino tal como se presente a ustedes, en cualquier manifestación que sea. Incluso si es la carencia de Amor que demanda una aclaración, no la juzguen, ni en vosotros ni en nadie, ni en ninguna situación. Conténtense de tratar de atravesarla sin reaccionar, conténtense de abandonarse a lo que se vive. Sobre todo en lo que concierne a los elementos, yo diría, nuevos e imprevistos que llegan en vuestra vida sin que lo hayan pedido, sin que los hayan deseado ni incluso dudado. Hay los elementos como esto que aparecen o que parecen aparecer, que solo son develamiento. Esto no es ya, yo diría lo que podrían llamar las responsabilidades en el sentido de vidas pasadas o lo que podrían llamar aún los desequilibrios sino más bien los mecanismos de equilibrio, más bien ligeros, que aunque parecen difíciles a veces y en todo caso mucho más radicales para llevarles al Pasaje y a mi Llamada.

Cualquiera que sea el Pasaje que vivirán estaré del otro lado para recibir lo que nunca han abandonado. Pero todavía será algo tan grande y tan fuerte que habrá a la vez esta Reconexión, este reconocimiento y esta Evidencia que no dejará ninguna sombra de nuestra filiación y de nuestra Eternidad. Entonces ¿para qué dudar? Si esto no es por supuesto el sufrimiento efímero y el exceso de lo que puede subir, de vuestra historia y de vuestra persona. Recuerden en esos momentos, que estamos en vosotros, como a su alrededor y que somos ustedes, y que van a ir muy pronto, si no está ya el caso, a comprender y a vivir sobre todo lo que les decimos ya desde hace mucho tiempo: Solo hay Uno, solo hay Amor. Todo el resto solo es pasajero y se disipa en la Luz del Amor.


En toda circunstancia y en toda ocasión, todo lo que pasa en ustedes sobre la tierra, contribuye a la misma Verdad que se instala de ahora en adelante, sin tener necesidad de buscar algo más en un futuro o en otra parte. Volver a ser como el niño es indispensable en este período precedente a mi Llamada. Como lo dijo Hermano K, descubran a través de esto, cualquiera que sea la coloración de lo que se desarrolle en vuestras vidas, esta madurez, esta estabilidad y esta Responsabilidad. Constatan que lo que les hacía reaccionar antes, quizá sea amplificado o haber desaparecido por completo, pero que esto no hace en definitiva ninguna diferencia excepto sobre el momento. Desde el momento donde permanezcan en el Momento que sigue, este momento pasado que les ha desequilibrado solo ha estado allí para mostrarles aún más precisamente el momento donde hay equilibrio, donde hay Paz. Así se adquiere la madurez, así se adquiere la Responsabilidad al igual que la Autonomía de sí-mismo en su relación con los demás, en su relación con su corazón y en su relación con el Uno.

¿Es que el Uno está lejos de ustedes como algo que es necesario alcanzar? ¿Es que el Uno se manifiesta en vuestra vida por la sincronicidad, por iluminaciones, cualquiera que sea su violencia? ¿Es que el Uno está establecido, haciéndoles desaparecer, poniéndolos a la escucha la más clara y la más límpida de mi Llamada? Todo esto lo ven, incluso si no lo aceptan aún, e incluso si lo que ven no parece complacerles o hacerles adherirse, no se preocupen, solo es pasajero. Y esto solo es lo que queda por atravesar. Entonces, déjense, déjense atravesar y amar ya que esto no es nada más que el Amor, ya lo saben, que viene a vosotros.

Solo la mirada de la persona puede hacer creer a la inversa. Aquellos que han perdido los valores no en su Esencia sino en sus peregrinaciones en este mundo, a través de las leyes de este mundo, pero ellos también son mis hijos, cualquiera que ellos digan o hagan, y ellos no podrán evitar mi Amor. Lo reconocerán en este momento allí pero con las dificultades para deshacerse de lo que no ha sido aliviado antes. Pero esto es su elección y su libertad. Y a través de esta comprensión, si puedo decirlo, a través de esta negrura, la semilla germinará porque ella está vivificada por mi Agua, ella está vivificada por vuestra misma Eternidad.


Vivamos juntos un momento de silencio antes de que continúe para decirles otras cosas.

...Silencio...

Mis hijos bien amados, permítanme proseguir.

Los tiempos que preceden a mi Llamada son aquellos directamente que viven en este momento, desde la apertura por el Angel Uriel. Aquí ahora desde hace algún tiempo que viven esta travesía de alguna manera, antes de llevarlos a la Resurrección de la Pascua, no por supuesto la final sino aquella que verá un nuevo nivel franqueado en vuestra libertad y vuestra Autonomía, en vuestra comprensión no de vuestra persona ni incluso de vuestra vida sino de vuestra Esencia directamente.

Muchas de las cosas les serán entregadas, dadas, mostradas de diferentes formas como lo he dicho. Y es en estos eventos que han comenzado a desarrollarse desde hace algún tiempo y que van a amplificarse durante el mes de abril bajo el impulso de la Luz Vibral, bajo el impulso del sol, bajo el impulso de las estrellas en el cielo. Los elementos nuevos van a manifestase sobre la tierra, desconocidos hasta entonces, firmando, para ustedes que saben, un cierto número de despertares, un cierto número de tomas de conciencia, no para ustedes sino para el conjunto de vuestros hermanos y hermanas que aún están dormidos y que deben aún vivir la última Gracia de nuestro encuentro antes de mi Llamada.

Estén pendientes, porque en estos días y en estas semanas, la vida está firmada y cada mirada, cada palabra escuchada o portada tiene el mismo sentido y la misma evidencia para aquel que quiera verlo. Que esto sea por tristeza, que esto sea por pesar, que esto sea por desesperanza, que esto sea por alegría, poco importa. Observen los frutos de todo esto, llegando de hora en hora, de día en día, fortaleciéndolos, cualesquiera que sean las apariencias.

La Fuerza, la fuerza del Espíritu está allí. Ella da a veces a vivir un sentimiento de debilidad, que esto sea por las oscilaciones, por el cuerpo, que esto sea por vuestros estados de ánimo, provocando incluso a veces un sentimiento de rechazo de ustedes mismos o de la vida, o de los demás. Pero esto no es importante porque tienen la fuerza impulsada por el Espíritu que va a permitirles superar y transcender, allí también vuestros hábitos, los pequeños errores de comportamiento donde uno se coloca ante los demás, donde uno se coloca a sí mismo antes que reconocer al otro. Y verán, que si aceptan la vida tal como ella se desarrolla, en ustedes y a su alrededor, verán que si sobrepasan los resentimientos u otros sentimientos pudiendo ir hasta la traición o el error, que si perdonan real y concretamente, simplemente por el Amor y no por el pensamiento, entonces, en este momento allí esto desaparecerá de vuestra vida, de vuestra vista, de vuestras emociones o de vuestros pensamientos.

Y van a descubrir de manera muy directa que el perdón no es simplemente una intención sino que es un acto real del Amor y de la Luz que solo depende de una sola cosa: de vuestra confianza en el Amor y no en ustedes mismos, la confianza en el otro y no en su traición, en lo que él es en Eternidad y que está en el mismo camino que ustedes, dándoles simplemente a ver otra faceta de sí-mismos ya que de lo contrario no tendrían nada que ver y más nada que vivir. Y recuerden que cada evento que está puesto cara a ustedes solo está allí para permitirles ser más libres, ser más fuertes y desaparecer más fácilmente en mi Presencia.

La Blancura que viene es aquella de la Virginidad, es aquella como la imaginan puede ser, de la primera Chispa de Vida, aquella de la primera manifestación de la conciencia, allí donde se encuentra el germen de toda conciencia. Todo esto se desarrolla en este mismo momento. No busquen nada más, que vivir vuestra vida. Si la vida los lleva en mis naves, o en las experiencias místicas, es que ellas son necesarias para ustedes. Si nada se produce, entonces encuentren esto, este Amor y ésta Luz en lo que la Vida les da a vivir, cualquiera que sea a veces el peso, porque esto no les concierne en nada desde el momento donde el Amor está allí.

Hijos bien amados, comulguemos juntos, en el corazón de la Fuente y en el seno del Espíritu del Sol, aquí mismo, allí.

...Comunión...

Hijos bien amados, e retiro ahora en vuestro corazón con todo el Amor de una Madre, con todo el Amor de una Madre Creadora, la de la Mar Primordial del fondo de los océanos, del Agua lustral y del resplandor de Vida en su primer Soplo.

...Silencio...


Yo soy María, Reina de los Cielos y de la Tierra. Con Amor y para siempre en el Amor.