BIDI – PARTE 1 – MAYO 2018


 
         Bidi está con vosotros y os saluda. Tal como lo he venido explicando extensamente durante los últimos dos meses, todo lo que está ocurriendo es la evidencia: la evidencia de la Resurrección, la evidencia de vuestra Eternidad. La evidencia del Corazón aparece de manera cada vez más evidente e importante en todas partes de la Tierra.


         Yo había insistido en que vosotros compartierais vuestras vivencias. Y no es una cuestión de ego, sino una cuestión de estímulo y de interés para todos aquellos de vosotros que no osaríais atravesar la puerta de lo Desconocido. A partir de ahora, la verdad que descubrís vosotros mismos en la conclusión del "uno a uno" y del "cara a cara" emerge a través de vuestras vivencias y no a través de discursos. Así es como están sucediendo las cosas.


         Hay una expansión de la Tierra que permite a la conciencia, esta vez de manera colectiva, salir de los condicionamientos y de las posturas. Y eso os lleva a constatar un cierto número de eventos que ocurren rápidamente -ya sea en el seno de lo que llamáis naciones, en el seno de grupos sociales o incluso en vuestras vidas... donde sea- y que vienen acompañados de la aparición de la Eternidad, sin importar las manifestaciones que ocurran en el mundo, en vuestro cuerpo o en vuestra conciencia. Y todo esto bajo la mirada estupefacta de vuestra conciencia ordinaria.


         Los testimonios están presentes sólo para calmaros y animaros a vivir lo mismo sin interponer ningún concepto, ninguna historia, ninguna cosa de antes, sea lo que sea. No podéis comparar más; no podéis tampoco medir más en vuestro interior las cosas que ocurren porque, como ya he dicho, es lo desconocido que se vuelve conocido, antes que el hecho mismo.

         Tanto colectiva como individualmente, no estáis creando, sino haciendo desaparecer el espacio y el tiempo que os llevan al Evento que ya está en vosotros y para siempre. Cada vez hay un número mayor de hermanas y hermanos a vuestro lado, estén donde estén, que están viviendo los mismos procesos. Y esto es así, real y concretamente, sean los que sean los sentimientos, que en vuestro caso pueden pasar por vuestros pies, por el corazón, por la cabeza, por el sacro, por la totalidad del cuerpo o por pequeñas molestias fulgurantes. Todo eso lleva hacia una sola cosa: precipitar el Evento. Todos vosotros sois los actores de lo que se produce en vosotros mismos.

         Así que yo no tengo mucho más que deciros en cuanto a conceptos; más bien recibir vuestras vivencias, vuestros testimonios y que hablemos juntos de ellos a fin de que cada uno encuentre allí los elementos que lo llevarán a su Verdad Desnuda, donde no puede haber ni duda, ni confusión, ni interrogación, sea la que sea la problemática de la persona.

         De hecho vosotros lo constatáis cada día y en cada encuentro: que estáis cada vez más lúcidos. Muchos de entre vosotros entráis en contacto de manera individual conmigo y, cuando me veis, yo sólo puedo aportaros una sola cosa: la sonrisa y la Risa de la Evidencia. Porque ese gozo que ha nacido en vosotros ¡es la Alegría del Universo entero porque os habéis reencontrado! Y aunque por el momento, hoy, en estos instantes, seáis pocos aún los que vivís el Amor Desnudo más allá de la forma y más allá de los mundos, es eso lo que está llegándoos a todos.

         La sucesión de encuentros de Luz, sean de la naturaleza que sean, son eficaces en todas partes; y en ellos, no hay otro objetivo que el de Ser lo que Sois. No tenéis necesidad ni de mí ni de ningún acólito para organizar un encuentro de ese tipo; basta con la Tierra, con un amigo... No hay que esperar nada en particular y no es necesario definir una meta. Simplemente ser dos hermanos o dos hermanas, o un hermano y una hermana, poco importa, que estéis en una actitud de bienvenida recíproca, total e incondicional, para que podáis verificar por vosotros mismos -y no como concepto- que cualquier otra cosa exterior a vosotros no es más que vosotros mismos también. Esta es la realidad que se vive; no es un concepto de unidad a desarrollar, sino que es una vivencia que se vuelve cada vez más intensa, cada vez más clara, cada vez más lúcida.

         En el momento del Amor Desnudo, cuando pasáis del Todo a la Nada, de la expansión a la contracción última... en ese momento, de un modo u otro, habéis realizado la Unión y sois libres. Libres no sólo de vuestra persona, sino también de los elementos dolorosos que existen aún y de la repetición de historias a través de las costumbres del alma -que no tienen nada que ver con el Karma ni con la familia-. Todo esto se evacúa también.

         Cuando os hablaba del plato de la balanza quería decir que podéis constatar que no se trata más de un equilibrio, sino de una amplitud que continúa agrandándose cada día a fin de aligerar, cada vez más, lo efímero, dejando, al mismo tiempo, que se densifique y aparezca en este mundo la Conciencia Una, la Conciencia Desnuda para que pueda liberarse de la conciencia misma, es decir del "Yo Soy". Allí donde la felicidad es total, sea lo que sea que se viva en la pantalla de este mundo o en vuestro interior.

         Ir del Todo a la Nada y de la Nada al Todo viviendo sus mecanismos os libera de la conciencia. Sois al mismo tiempo el conjunto de conciencias de lo que sois y de todas las conciencias de cada uno sobre la Tierra, sin ninguna diferencia: de amigos y de enemigos, de santos y de diablos... Es eso lo que concientizáis, es eso lo que vivís y es esa vuestra finalidad, si puedo decirlo, que está ya presente.

         Vosotros también haréis cosas por vuestra sola presencia y por vuestra calidad de Ser, no por la voluntad del ego, ni por hacer algún tipo de demostración, sino como una evidencia que se instalará también a través de vuestras palabras, de vuestra mirada, de vuestra presencia, de vuestra bondad y de vuestra humildad.
        

         En ese momento notaréis la ligereza de vuestro Efímero. Hablo de la consciencia, no del cuerpo; cuerpo que experimenta una reacción que notáis a través de las diferentes Fusiones Planetarias del tipo que sean. Habéis empezado a percibir y a vivir vuestra Eternidad aquí mismo, lo que os da acceso tanto a la totalidad de las posibilidades de la Conciencia, como también de la a-Conciencia en el seno mismo de esta persona. Algo que os permite experimentar toda una gama de posibilidades en todas las dimensiones.     
         Pero os recuerdo que vuestra presencia aquí y ahora, sea lo que sea lo que estéis viviendo en estos momentos privilegiados y cada vez más extensamente, no os debe hacer olvidar quedaros aquí, ahí donde estéis. Mientras quede en vosotros la mínima muestra de querer acabar con todo esto, el mínimo atisbo de no estar en Totalidad y en sincronicidad con las Fusiones, entonces el cuerpo se manifestará a través de la colocación y el posicionamiento de vuestra consciencia. Y aquí hablo del conjunto de consciencias que sois, incluida la a-Conciencia, que entra en resonancia, en manifestación y en unicidad.

         
         Esto es lo que acompaña la finalización de vuestra Resurrección, que es la capacidad, para muchos, de vivir en el mismo cuerpo, en el mismo tiempo, en el mismo mundo tanto la Conciencia más magnificada, como la a-Conciencia, en el seno de una misma persona. Este proceso participa en está finalización, pues os conduce a estar de manera cada vez más permanente en la Infinita Presencia, y no únicamente en el papel del observador. Es el momento en el que os dais cuenta de que todo lo que está sucediendo en la Conciencia y en las alteraciones de Consciencia viene de lo mismo. Hay UNA Conciencia, sólo una y vosotros ni siquiera sois esa única Conciencia; sois anteriores. Y las experiencias y los testimonios que proporcionaréis o proporcionáis ya son tangibles.


         Mientras expreséis conceptos o ideas, no vivís nada, pues desde el instante en el que vivís esta Resurrección, ya no tenéis necesidad de cargar con conceptos, con religiones o con personajes históricos, sean los que sean. Sólo los que se aferran a la Historia están todavía en películas con María, Cristo, los Ancianos, las Estrellas… Vosotros, ¡vosotros sois libres y podéis empezar a vivir lo que sois!, desde los Arcángeles, los Ancianos, las Estrellas o el niño que muere de hambre al otro lado del planeta, hasta ese que os insulta y que está justo a vuestro lado.


         ¡Es un juego! Ahora simplemente ya no hay que aceptarlo más como en el principio de la Refutación, sino que hay que vivirlo ins-tan-ta-nea-men-te. Y esta instantaneidad no depende de ninguna condición previa, sino, simplemente, de la calidad de vuestra manera de recibirlo. No estoy hablando de la apertura del corazón mismo, sino que hablo únicamente de la capacidad de recibir lo Desconocido sin frenos ni desvíos, sin temor ni inquietud. Eso es lo que os prueba a vosotros mismos que habéis aceptado real y concretamente el Sacrificio.

        

         Todo el resto se realiza por sí mismo cuanto más instalados estéis a través de este cuerpo. Y no hablo siquiera de alineamiento, de meditación o de diversos momentos de Fusión, sino de momentos donde estáis solos, cara a cara con vosotros mismos; momentos donde hay mandatos personales de la Luz. Es ahí cuando vais a finalizar vuestro reencuentro, sin ninguna duda posible, sin ninguna interrogación de la persona; y ahí sí, con Evidencia.

         Desde hace ya más de dos semanas, algunos de entre vosotros salís consciente e inconscientemente en Conciencia Desnuda. En Conciencia de Eternidad en vuestro Cuerpo de Eternidad, no puede haber olvido de la conciencia, pues hay un recuerdo de lo vivido en Conciencia Desnuda. Ocurre bastante a menudo que las primeras veces vais a constatar, como antes, una desaparición pura y simple, sin ningún recuerdo de lo vivido. Pero a pesar de eso, podréis constatar los efectos sobre el posicionamiento global de vuestra Presencia en el seno de este mundo, donde la flexibilidad, la evidencia y la aceptación aparecerán de manera cada vez más constante.

         No debéis tampoco culpabilizaros si no vivís nada, porque cada día, cada hora, sois cada vez más numerosos los que lo estáis viviendo. No hay urgencia para vivirlo; hay sobre todo urgencia para recibir lo que no os es aún accesible. Y para aquellos para los que sí es ya accesible, tratad de dejar que las cosas se hagan, sean las que sean. Id en el sentido de la evidencia, de la fluidez y de la facilidad. Y cuando eso se resista, es necesario hacer un reposicionamiento de creencias y de percepciones, no cambiando los conceptos, sino ¡olvidándolos, justamente!

         Atreveos a estar desnudos; atreveos a estar solos; atreveos a estar con cada uno; atreveos a recibir un alma en vuestro Corazón. No hay una técnica ni un protocolo a seguir; no hay una preparación. Es una disposición del Espíritu y de la Conciencia... estar receptivos. No hay ninguna obligación de sentir ni de percibir, sino tan sólo de orientar vuestra persona y vuestra conciencia, sea la que sea, hacia esta noción de Recepción... porque en la Recepción estáis obligados a estar realmente presentes.

         Recibir no depende de un instante pasado y no depende de los hábitos; no depende de un resultado, ni de mañana. Recibir depende exclusivamente de vuestra capacidad para estar presentes de manera lúcida y, si es posible -en todo caso al principio-, inmóviles a nivel del cuerpo. Y sobre todo, no pedir nada, no esperar nada, no aguardar nada más que estar totalmente inmersos en esa recepción en el instante presente. En los próximos días constataréis que hay resurrecciones súbitas en algunos hermanos y hermanas que no han pedido nada, que no han vivido nada.

         El proceso gana a la vez consciencias, terreno y tiempo. Y todo eso ocurre según una lógica que no tiene nada que ver con lo humano, sino con la lógica de la Conciencia. Quedaos tranquilos. No tengáis ya más ninguna avidez en el sentido espiritual, en el sentido de la comprensión. Tened esa avidez de vivencia aunque, en realidad, no podéis tampoco desearlo, pues sólo podéis recibir lo que ya está ahí. Si no lo vivís, no son problemas de resistencia, no son problemas de karma... como máximo, de costumbres. Costumbres tomadas por el alma para encarnarse en medios particulares pero que no tienen ya nada que ver con vuestra persona, nada que ver con vuestra consciencia. Ni siquiera con un inconsciente que habría que recordar o dejar emerger.

         La llave... sólo hay una: el instante presente. Aquí y Ahora, en la recepción total e incondicional de lo que ES. Conocido o desconocido. Y simplemente dejar hacerse lo que ES. La Luz no necesita a vuestra persona, incluso aunque la persona y este envoltorio sean una de las partes. Ya no estáis en el estado de despliegue de la vibración y de actualización de las Puertas del Cuerpo de Eternidad, pues como habíamos dicho ya desde hace tiempo, todos los Cuerpos de Eternidad estaban presentes. Había sólo -si puedo decirlo así- que deslizar la conciencia de un punto a otro. Y eso es exactamente lo que estáis viviendo ahora.

          Así que hoy no quiero hacer grandes discursos, sino mas bien acompañaros en los testimonios de vuestras vivencias, bien hayan ocurrido durante cualquiera de las Fusiones, o bien se hayan dado de manera espontánea en cualquier otra ocasión.
    
         Sean cuales sean las manifestaciones de la Conciencia, existen, por supuesto, puntos de referencia en este desconocido que están situados en lo conocido de vuestro cuerpo. Es la Percepción Vibral apareciendo en ciertos sitios, y en particular, en los pies, en el sacro, en el corazón y en la cabeza. Pues es justo entre estos diferentes "pisos" donde se reúne y se unifica, donde se juega y se actualiza la Resurrección desde el instante en el que habéis acogido de manera incondicional, sin restricción alguna y con humildad, a la totalidad de lo que ES. Entonces, en ese momento, vuestra consciencia es liberada, es decir, que os liberáis de la Conciencia misma. Ahí hay Amor Desnudo. En ningún otro sitio. Y esto no depende de ninguna circunstancia ni de ninguna vibración. Es expansión y contracción, es la libertad de la expresión de la vida en todos los planos.



 

         De modo que, desde este momento, os invito a dar vuestros testimonios, dejando las preguntas para otros días; vuestros testimonios sobre vosotros mismos, pero sólo de lo que supera a la persona, de lo que la transciende. Y es que aunque existen signos a nivel corporal, lo importante evidentemente es el posicionamiento de vuestra consciencia en la evidencia o no de lo que vivís; en la evidencia o no de la estabilidad de vuestro humor en el seno del silencio o de la alegría; y también en la preponderancia que toma la Eternidad no sólo en el tiempo, en la balanza, sino también en la manifestación misma de vuestra consciencia en el seno de lo Efímero.

 

         Si el tiempo nos lo permite, vais a identificar por vosotros mismos y a constatar con evidencia muy claramente -mucho más que antes- los momentos en los que estáis en la persona y los momentos en los que estáis más allá de la persona, en el Corazón del Corazón, en la Eternidad o en el Absoluto. Cuanto más avanzáis hacia la finalización de esta Resurrección, más constatáis el aligeramiento tanto del mental como de la memoria; más constatáis las posibilidades de movimientos del cuerpo, que están como desacelerados, fuera de todo dolor... o al contrario, acelerados. Las condiciones mismas de vuestro Efímero están profundamente transmutadas no sólo en el caos del mundo, sino también a través de vuestra intimidad en este mundo.

 

         He aquí lo que Bidi quería decir como preámbulo. Ahora entonces vamos a compartir a través de lo que habéis vivido. No hablo de vuestras personas, ni del envoltorio, ni de los cuestionamientos que le conciernen. Veremos eso después. Lo que nos interesa en el inicio de esta semana completa de Fusión en la Eternidad es, más bien, que desde ahora mismo aportéis vuestra piedra, si puedo decirlo así. Por eso Bidi os da la palabra y os deja, en cierta forma, ofrecer testimonio sobre vosotros mismos, más allá de la persona, sobre la Verdad de vuestra vivencia y sobre las implicaciones que eso tiene para vosotros, como personas, en este mundo: en vuestras acciones, en vuestros pensamientos, en vuestras ideas, en vuestras relaciones. 

 

         Ahora Bidi escucha. Durante las dos horas de mi presencia, os pido también que, cuando me exprese de manera personal, constatéis mucho más allá de esta sala no la influencia vibratoria de mi verbo, sino la influencia de mi Presencia en vuestra Presencia. Pues es eso lo que os va a permitir -incluso sin escucharme directamente en esta franja horaria tanto hoy como mañana o cualquier otro día- tomar consciencia de que no sois la consciencia... a fin de que, por fin, el Libro se termine.
      

 Entonces, ¿quién va a expresarse?


         ¿Quiere escuchar hoy testimonios escritos? Son de personas que no están presentes.

 

Por supuesto. Preguntas no, pero testimonios sí.
 

         “Durante una Fusión de Eternidad a través de Bidi, viví un momento muy intenso para mí, con mucha alegría. Tuve, de hecho, muchas veces ganas de reír. Bidi, sentí tu presencia en todo mi Ser, en cada una de mis células. Me sentía completamente en el corazón llena de amor. Tenía la sensación de olas que me envolvían por completo. Mi corazón se dilataba. Todo en mí se agitaba. De hecho, me levanté con picores en los brazos y en las piernas. Tengo desde entonces una mayor sensación de ligereza y una mayor paz interior". Fin del testimonio

         Es exactamente lo que os decía: lo otro es vuestra intimidad y aquí lo que nos interesa es lo que se vive. Claro que, después, cada uno tiene sus particularidades: ver imágenes de vidas pasadas, fundirse en la luz, manifestar algo a nivel del cuerpo... Eso os pertenece. Este tipo de testimonios son capitales. ¡Retened lo que ha dicho! Y ya os lo he dicho yo también: me veis y para algunos estoy en vosotros. Esto es Acoger. Y cuanto más acojáis, más estaré en vosotros, como vosotros estaréis en mí. Y como yo ya no tengo forma, seréis directamente inscritos, despertados, al seno de mi Consciencia Desnuda más allá de la forma y de los mundos. Lo mismo ocurre con mi ayudante [se refiere al vehículo -Jean Luc Ayun- que le permite transmitir su mensaje], pero ocurre también con vosotros. Y cada vez más por vosotros mismos. ¡Experimentadlo!

         Lo que ha descrito este testimonio, efectivamente, es la sonrisa cuando llego yo; es esa especie de júbilo al acogernos el uno en el otro, con el fin de permitiros vivir esa ligereza, esa alegría sin objeto alguno... esa Evidencia, esa Gracia.


Entonces, ¿tenemos otros?

         Sí, tenemos otro testimonio escrito de una hermana que no está presente: “Hace de esto quince días... Efectúe un viaje de larga distancia en coche y estaba conmigo una joven pasajera que recogí para hacer un uso compartido del coche. En un momento dado, nos paramos en un parking, y justo antes de retomar el camino sentí una orden que provenía de la Luz. Pregunté entonces a la joven, que no conocía de nada, si podía esperar cinco minutos para que descansara (había un plazo que respetar con respecto al horario de llegada a destino). Al cabo de cinco minutos sentí que podía retomar el camino, pero estaba todavía en un estado de éxtasis, de expansión, de plenitud... Tenía la sensación de flotar. Y entonces, de manera extraordinaria, observé que mientras hablaba con la joven que no paraba de hablar, parte de mí la escuchaba y le respondía, y otra parte de mí conducía. Mientras tanto, yo seguía flotando en la alegría y en el éxtasis. De vez en cuando miraba el GPS y las señales de tráfico, y observaba que, aún sin prestar atención, estaba en el camino correcto. Esto duró más de tres horas, y paró al acabar el viaje.

         Una semana más tarde, estaba esta vez trabajando en el jardín y, de golpe, sentí como una expansión, una alegría, una plenitud. Sentí cómo me pesaba el cuerpo y cómo mis movimientos se enlentecían, pero no tenía la necesidad de estar tumbada, así que continué. Durante toda esta actividad, mi cuerpo continuó efectuando tareas a cámara lenta mientras yo estaba en un estado de éxtasis, de alegría y de plenitud. Siempre esta sensación de estar flotando, pero de estar a la vez aquí y de observarlo todo. Cada vez que tenía la sensación de estar presente en lo que sucedía dentro de la persona, estaba a la vez más allá de todo esto, en una plenitud, una alegría, una gran ligereza y un amor indescriptibles. Todo esto estando aquí, en este mundo. Gracias" .

         Eso es exactamente lo que os decía: la posibilidad de vivir en este cuerpo, en el seno de lo Efímero, la multilocalización de las consciencias que sois. Es exactamente esto. Además, este testimonio lo dice también: ese sentimiento de ser la otra alma o la otra consciencia porque ya no hay alma; es una realidad. Son vivencias, y los testimonios de vivencias son palabras simples. No hay necesidad de visiones o historias para contarse, aunque existan en otras dimensiones.

         Estáis en una alquimia particular que está concluyendo, donde lo que es imposible se realiza. Tenéis aún un Efímero más o menos importante; tenéis el gozo que está presente y la Conciencia, tal vez ocupada en otra parte. Todo eso se unifica en el mismo instante. La etapa siguiente, que no es ni obligatoria para todos pero que de todos modos se realizará, es la capacidad de vivir el conjunto de conciencias y la a-conciencia no desde el cuerpo, sino desde la Eternidad. Primer punto de vista: el testimonio de la persona que vive la Eternidad. Última etapa: testimonio de la Eternidad viviendo el Efímero.

         En ese momento vuestra palabra es el Verbo, lo que veis es Luz, lo que vivís es la Evidencia. El hecho de ver en Eternidad o en Conciencia Desnuda vuestra persona os muestra innegablemente, y sin necesidad de entrar en otro cuerpo, que la Conciencia es libre y que estáis liberándoos de esta conciencia del "Yo soy". Lo veis naturalmente, sobre todo en los llamados "dominios espirituales": hay algunos que están en el simulacro de la Resurrección y hay otros que testimonian realmente esa Resurrección. No se trata de palabras, sino de vivencias. El que traduce su vivencia, sean cuales sean las palabras que utilice, es la Luz, simplemente explicado. El que vive el simulacro e intenta experimentarlo como un concepto no tiene nada que ver. Todos los falseadores de la Unidad van a comprenderlo tal vez.

         No podéis vivir la Eternidad y la Resurrección, sea el que sea el estrato, si no se vive el proceso del Sacrificio real y concreto. Es una dinámica interior donde finalmente decís "suelto todo. Padre, hágase tu Voluntad y no la mía". Mientras, en este período, exista la mínima voluntad sobre lo que sea, se creará una resistencia y eso va a quemar a nivel del cuerpo.

            No os cuestionéis hoy, ni siquiera por un sufrimiento. De hecho ya lo he explicado suficientemente: que cuando una persona desaparece, no sirve de nada hablarle de su persona, sino únicamente del Amor que se despliega, porque, en un momento dado, es vuestro propio Amor es el bálsamo; es vuestra Eternidad, vuestro propio corazón el que armoniza en el Efímero de la conciencia y del cuerpo.

         Todo lo que tenéis que hacer -para aquellos que quieren expresarlo- es manteneros en esta humildad. Lo que es vivido, cuando es verdadero, no necesita historias, no necesita visiones, no necesita ver imágenes ni escenarios, porque el Amor toma realmente en ese momento todo el espacio y cuanto menos lugar dejéis a las visiones, más disponibles estaréis. No tenéis nada que traer aparte de lo que sois: ¡Amor! Todo lo demás sólo pasa, pero a veces lo vivís también.

         No hay necesidad de aclarar, mediante imágenes o sensaciones exactas, que vuestra persona fue esto o aquello: no hay necesidad de ir más lejos. Lo que es visto se atraviesa y no hay que interrogarlo. No es para guardarlo, no es para glorificarse. Y las palabras que vais a utilizar o son el Verbo, o son simulacro. Pero acordaos que no podéis engañar a nadie más, pues el que está resucitado, sea la que sea la lengua o las palabras, él capta mas allá de las palabras, más allá de los sentidos, el Vibral, el Verbo o no.

           
No vais a testificar sobre vosotros mismos, ni sobre la Biblia, sino sobre vuestra vivencia. ¿Por qué queréis ocultar, guardar el secreto de eso que nada tiene que ver con el ego, de eso que es totalmente impersonal, que es la Realidad de la Luz? ¿Cómo queréis que ilumine el mundo si os contentáis con vivir eso en vuestro corazón y, sobre todo, que no se vea en ninguna parte? No podéis ocultaros más a los ojos de vuestra familia, de vuestro marido, de vuestra esposa. Debéis asumir, ser responsables y manifestar, sin ninguna voluntad, la realidad de quienes sois. No se necesitan palabras; se necesita Honestidad, se necesita la Verdad. Entonces vuestras palabras serán siempre justas, como estos dos primeros testimonios que ilustran bien los conceptos y las vibraciones que habéis vivido.

Continuamos...

         Durante una sesión con usted en octubre pasado, le dije que no tenía preguntas y que esperaba su respuesta. Ya en el momento de preguntar, sentía la sonrisa que subía y, a medida que usted respondía, era como si la sonrisa se agrandara hasta que yo me volvía nada más que en una gran sonrisa. Al mismo tiempo, no sentía más la diferencia entre su sonrisa y mi sonrisa, entre usted y yo. Yo le sentía, yo me sentía, sentía una mezcla... Te agradezco.

         Esto ilustra todo lo que acabo de decir. La sonrisa se trata solo de vosotros mismos, porque hay una sola Conciencia. Reconocer eso os libera definitivamente de toda atracción hacia cualquier historia de este mundo, la vuestra sobre todo y la Historia también; sois libres. Sólo falta dejar a la Luz desempolvar, si puedo decirlo así, lo que deba ser limpiado, a fin de que vuestros vestidos sean enteramente lavados.

        
Y es lo que voy a realizar toda esta semana con vosotros durante las reuniones y, a partir de ese momento, -como en el caso del último testimonio- constatareis que estoy en vosotros como cualquiera sobre el planeta. Se terminó la separación. ¿Qué queréis que quede de ella?

         Esto hoy hay que resituarlo de manera general con respecto a todas las Fusiones que se han producido durante las dos últimas semanas en diferentes momentos. Se trata concreta y enteramente de vivir al Otro en Uno mismo. ¿Quién puede quedar como enemigo en ese caso? ¿Qué puede quedar como enemistad? ¿Qué puede quedar como incomprensión? ¿Qué puede quedar como problema? Desde el momento que el otro se vuelve tú y tú te vuelves él, todo eso está permitiendo la desaparición de la Anomalía Primaria sobre la Tierra, lo que os permite entonces vivirla con facilidad.

         Incluso las Estrellas en su época, durante toda su vida en ciertos casos, se han encargado de almas, pero ellas han tomado un alma o dos. Hoy vosotros podéis tomar el mismo elemento, pues este Amor de toda la Humanidad está en vosotros, digáis lo que digáis sobre ello y lo queráis o no.

         El otro no es otra cosa que tú, con una forma diferente, pero sois los mismos. Todos somos absolutamente los mismos. Lo repito y lo verificareis: hay una sola Conciencia y es lo que cada uno Es. Eso no podéis comprenderlo, y aceptar el concepto no os sirve para nada. Por contra, cuando lo habéis vivido, aunque sólo sea conmigo, o con el acólito, o con otra persona, o con el conjunto de la Tierra, en ese caso, es suficiente. Sois incluso libres de vuestra conciencia y como los dos primeros testimonios e incluso en este último caso, está en curso de actualización. Ya no funcionáis más atados a una forma, a un ego, a un mundo, a una historia de ese mundo ni a la vuestra, sino que funcionáis directamente en dirección de la Conciencia. Eso es lo que se traduce en este mundo.

         Es entonces cuando se da la conjunción del Amor y de la Sabiduría del Todo y de la Nada en el mismo saco. Ahí no tendréis ya más sed. Ahí ya no hay ninguna responsabilidad más de este mundo que resista, pues la única responsabilidad que os incumbe es la de amar mas allá de toda medida, sin restricción, instantáneamente, espontáneamente, sin reflexionar. No necesitáis visualizaros amando a alguien; se trata de aceptarlo en conciencia y así es como ocurre. Ya no hay más procesos ni costumbres de la persona ni del alma que puedan influenciar, dificultar o restringir eso.

         En cada corazón están todos los demás corazones de este mundo, de todos los lugares. Y no juzguéis... ya os lo había dicho. Porque cuando juzgáis, cuando criticáis, es a vosotros mismos a quien hacéis daño y eso vais a vivirlo ahora. Es decir, que si vuestra postura al vivir las Fusiones, sean del tipo que sean; si al vivir los procesos del Corazón Ascensional continuáis separando por simples juicios -que no son condenas de nada ni de nadie- vais a constatar rápidamente que os estáis haciendo daño a vosotros mismos y a nadie más. Porque cuando resucitáis y vivís esos procesos de Conciencia multi-localizados y deslocalizados al mismo tiempo, es mucho más que las experiencias iniciales que habéis vivido hace diez años. Sentís bien que no tiene nada que ver. Ya no son más experiencias; son estados que se instalan de manera permanente, que se concretan y que se iluminan cada día un poco más. En este gozo no hay lugar para los elementos de la persona, del ego, de la crítica, del juicio, de la separación. Se vive al Otro como otra cosa de Uno mismo.

         Mientras no lo viváis, ¿qué es este Amor? Es un amor condicionado. Pero si vuestro Amor es el mismo para cada uno, para cada mirada, para cada percepción, entonces seréis liberados rápidamente de la conciencia. De este modo, el juego mismo de vuestra Presencia lúcida aquí, en este mundo, va a sincronizarse y a adaptarse rápidamente a la Luz que está aquí. Y eso podrá llevar a aclaraciones que no son para retener ni para explicar, ya sea sobre los hábitos de esa vida, o incluso, a veces, acerca de imágenes de carácter personal relacionadas con los hábitos del alma, en forma de escenas fugaces de lo que habéis sido y sobre todo escenas donde habéis vivido cosas que hoy se manifiestan en vosotros, más allá del karma.

         Acordaos de que eso concierne a la persona, es decir, que vuestra Eternidad ilumina vuestro propio personaje, vuestra propia alma, y si os mantenéis tranquilos, si no os "engancháis" de nada de eso, entonces la Evidencia se produce. Y sabemos pertinentemente por haberlo vivido, unos y otros, los Ancianos, las Estrellas -no los Arcángeles, claro está-... sabemos todos -incluso si algunos de entre vosotros no habéis terminado vuestra Resurrección-... sabemos que el Otro es Uno mismo. No es un concepto, es una vivencia.

         Queréis ser libres de la conciencia y estar en el gozo inextinguible del éxtasis permanente; sin embargo, eso no será posible mientras exista en vosotros la mínima separación entre las diferentes partes de vuestra conciencia que están conectadas a la libertad desde hace varios días y que va a continuar amplificándose.

         Cuando constatáis que este Amor, que esta Conciencia llenan todo el lugar, estáis obligados a constatar, al mismo tiempo, la desaparición pura y simple de la consciencia personal; la desaparición pura y simple de ciertos elementos personales, incluso concernientes a las funciones del cuerpo. Todo eso se hace naturalmente. No es un esfuerzo, no es algo que debéis trabajar; es algo que Es. Desde ahora no necesitáis discursos o explicaciones complementarias. Todo lo que era deseable y útil os ha sido comunicado y, además, cuando estáis en este Amor que existe más allá de toda conciencia y de donde emana el Amor entre las Dimensiones, hasta las células, hasta el átomo-germen en lo más alto es Conciencia lucida.

         Acordaos: hoy no podéis luchar ya más contra vuestro personaje o contra vuestra persona. Por supuesto -tal como ya fue dicho- si hay algo, ocupaos de ello, pero a través de los mecanismos de la conciencia, que no es para nada la misma cosa. Cuanto más tranquilos estéis recibiendo lo que pueda emanar de las imágenes, de las emociones, de los recuerdos... incluso si es un proceso sensible que concierne, por ejemplo, a una puerta, en ese caso claro que nos devuelve al pasado; pero, justamente, a la resolución de ese pasado, que puede ser más o menos ardua.

         Desde el instante en que hayáis realmente vivido y aceptado que el Amor se encarga totalmente de la vida, cada vez desaparecerá más vuestro Efímero, que puede quedaros en forma de obligación moral, social o de la naturaleza que sea, frente a la Evidencia de la Verdad. Y si me decís "sí, pero debo ganarme la vida", os diría que no habéis entendido nada, porque lo que pasa ahora no tiene nada que ver con lo que ocurría los años anteriores. Lo estáis viviendo, lo veis en el mundo: este caos extremo, que es el desgarro total del alma colectiva del mundo. No es el sistema de control del mental humano ni las líneas de depredación; son los hábitos que tomó la humanidad en su conjunto.

         Tener necesidad de Dios o renegar de Dios... ¿en qué cambia vuestra vida que reneguéis de Él o que lo aceptéis mientras no lo hayáis vivido? ¿Para qué os sirve preguntaros sobre un mecanismo vivido, si el mecanismos vivido es la iluminación? Todo eso son los hábitos del alma colectiva: el posicionaros en "el bien" y "el mal" inevitables de este mundo, en la reencarnación, en la espiritualidad de pacotilla que no llevan a nada.

        

         Todo esto lo veis y lo experimentáis cada día en cada circunstancia, estéis o no resucitados. Y cuando os decimos que es planetario, ¡es que es planetario! Cuando os decimos que es el conjunto del Sistema Solar, ¡se trata del conjunto del Sistema Solar! Y no olvidéis que todo lo que se juega en este alboroto de los eventos cósmicos y terrestres, como los vuestros, todos tienen lugar en vosotros mismos. De la misma manera que el posicionamiento de cada uno es exactamente lo que tiene que vivir, sobre todo si no lo comprendéis.

 

         Ahora que estáis por ejemplo resucitados, casi terminados, tenéis alguna cosa que aparece en el cuerpo o en la cabeza. Por supuesto que a veces hay que ocuparse, pero eso habla también de una dificultad para soltar totalmente la historia, la persona, lo anterior, lo vivido. Pero no debéis culpabilizaros por eso, porque a ese nivel el único medio que tenéis de concientizar es a través de imágenes fugaces, de mecanismos de sincronicidad o de palabras que parten de vuestro Efímero y que vienen -como vosotros- a iluminarse desde el interior acerca de esos hábitos.

         No busquéis otra cosa. ¡Dejad al Amor crecer! Sobre todo que a partir de ahora, esta dependencia total en vosotros, entre el Todo y la Nada, entre todas las conciencias y la a-conciencia, todo eso es fácil y vosotros constatáis de hecho -incluso si tenéis una determinada patología, que a pesar de todo, a pesar del sufrimiento, aunque el mental pueda estar un poco perturbado- que no os afecta más. Es decir, que el gozo perdura -al menos el silencio o el éxtasis- y que entonces no existe nada en el seno de este mundo, o de vuestro cuerpo, o de las obligaciones de este mundo, que pueda resistir a lo que sois.

         Hasta el momento no os he dicho que debéis encerraros o que debéis dejarlo todo. Al contrario: debéis quedaros ahí, pero aceptándolo. ¡Vividlo! Porque, evidentemente, esa aceptación es parte del sacrificio y de la bienvenida. Ahí es entonces cuando finaliza vuestra resurrección.

         De hecho os puedo decir que la finalización de vuestra resurrección y la salida en Conciencia Desnuda -cuando la reunificación del conjunto de conciencias y de la a-conciencia se realiza en el centro de vuestro corazón- no cambia nada. La experiencia es la misma, ya que el mundo está en vosotros, sin importar si lo vivís en Conciencia Desnuda o través del cuerpo, pero, eso sí, a condición de no quedarse allí presos. ¿Y cómo saben si están allí presos? Es cuando vivís algo que no comprendéis y cuando volvéis no tenéis ninguna pregunta en relación a eso. Es algo evidente. Si hay interrogantes, eso sólo puede venir de la conciencia personal y si esos cuestionamientos existen aún, se van a transformar en una carga. El simple hecho de tener dudas acerca de esta evidencia creará un peso en la conciencia, en el cuerpo.

         La bondad, la inacción, la humildad, la Recepción incondicional y el sacrificio son los garantes de la finalización de vuestra Resurrección. Por supuesto que eso no cambia en nada la finalidad, pero para estimularos puedo deciros que si sois cada vez más los que estáis en Conciencia Desnuda o en Amor Desnudo, sin ninguna duda aceleraréis -sin ninguna voluntad- el Evento en el tiempo y en el espacio. Porque en ese momento vuestra presencia no está más sumisa al resto de almas colectivas; vuestra conciencia no está más sumisa a las costumbres del alma que se está disolviendo, y eso os hace vivir procesos localizados en el pecho, ya sea que estéis aquí o en otra parte explorando la Conciencia Desnuda.

         Sois conscientes por todas partes: conscientes en la persona, conscientes en el cuerpo, conscientes en el otro, conscientes en el Sol... y sin ninguna dificultad. No es un sueño; os lo había dicho el mes pasado y el anterior: estad preparados para lo inesperado, para lo imposible. Es inconcebible... ninguna palabra puede expresarlo. Yo creo que mi acólito lo había llamado "eso" porque la palabra "amor" ha sido utilizada en exceso... Tantas hermanas y hermanos de este mundo se han hecho un representación falsa por costumbre, por ego, por karma, por las vidas pasadas, pero sobre todo, por el alma colectiva, que eso os limita. Dejad crecer el Amor en el tiempo, tanto en el espacio de este cuerpo vuestro como en el del planeta. Cuantos más lo hagáis y más seáis, más livianos seréis y más experimentaréis el Gozo y la Evidencia.

¿Tenemos otros testimonios?

Sí. El testimonio de una hermana.
         Amado Bidi...  hace mucho tiempo que te he recibido ya en mí, durante varios años de hecho, y las experiencias han sido múltiples: desde éxtasis, orgasmos o efusión de fuego al límite de lo soportable, hasta el Cuerpo de Eternidad, que se ubicó en su lugar y que vibra y gira. A principios de este año, se instaló un fuego, una inflamación, entre el noveno y el décimo cuerpo. Una inflamación tal, que me obligaba a dormir sentada para no ahogarme. Tu amado acólito vino para disolver y hacer explotar eso y desde entonces está reabsorbiéndose.

         Durante ese período, se instaló un gran vacío en mí. La paz seguía pero el gozo no estaba ya presente, como antes, y un hermano del corazón se burlaba de mí con mucho amor porque yo decía todo el tiempo que estaba "estancada". Ahora el amor está de nuevo aquí, el gozo está también, la vibración está, pero con una dulzura infinita. Algo muy, muy delicado y muy vibrante que envuelve el cuerpo, que me hace liviana y también cuando escucho, cuando recibo, cuando oigo los testimonios o a mis hermanos y mis hermanas, vivo al mismo tiempo en mi interior lo que ellos están describiendo. Estoy a la vez escuchando y viviendo lo que ellos cuentan. Y hay momentos en que me siento como si cayera un poco en mi interior y, después, siento un sobresalto, pero la Alegría no me abandona ni la vibración dulce que me hace sentir flotar siempre... pero no tengo los dedos sobre la otra orilla.

         ¡La otra orilla vino a ti! Entonces no necesitas nada más, como he dicho siempre. Tu testimonio es perfecto. Tú estás en Consciencia Desnuda. La Alegría es el testimonio. Tú funcionas sobre los diferentes planos de Conciencia y, sobre todo, tú misma dices que cuando oyes un testimonio, lo vives en ti. Esto muestra el poder del Amor, pero también la realidad de que, si el otro vive sus palabras, si son verdaderas, ellas viven en ti.

         Verifiquen cómo los testimonios son importantes; no para ustedes aquí, ni para mí, ni para mi acólito, sino para todos aquellos que escuchen. Da igual que os digan que es una locura, o que digan que viven lo mismo... No cambia nada, porque estas palabras describen testimonios y, cualquiera que sea su bagaje intelectual o gramatical, el testimonio es el mismo: es el testimonio del Amor y de la Resurrección. Y ustedes son contagiosos, no sólo a través de su Presencia, de su mirada y de su pensamiento, o acogiendo el alma del Otro en ustedes o encontrándoos en todas las almas, sino también, y sobre todo ,a través de esa Alegría que permanece sin sufrir ninguna interrupción, aunque algunas veces sea más el Éxtasis, y otras veces, más el Silencio.

         Si hay tiempo antes del Evento, muchos se convertirán exactamente como nosotros, como yo. Por cierto, vosotros sois yo. Verificad eso. No hay que practicar nada. No hay que reflexionar sobre ello. No hay que resolver. Yo diré que a partir de finales de esta semana, todo lo que no sea del orden de la Eternidad y del Amor vivido a través de la persona, no podrá interesarles más, ni siquiera preocuparos. Yo ya lo había dicho: la Luz toma todo el espacio, todos los tiempos. No hay ninguna circunstancia personal que pueda mantenerse ante esto.

         Mientras permanezcan preocupados -no me refiero a vuestro cuerpo, pues siempre he dicho que hay que cuidar de él-, sino preocupados con el ayer o con el mañana -cualquiera que sea ese mañana-, esto quiere decir que aún no tienen completa confianza en el Amor, en lo que ustedes mismos son. Pero eso no es importante, pues es suficiente hacer esa vivencia una vez.

... Silencio...

Otro testimonio.

         Es una sensación que apareció recientemente, desde hace menos de una hora.

¡Es todo nuevo!

         Sí. Tengo la impresión de que mi pecho ha quedado muy grande, enorme, y que todo el planeta está dentro de mi pecho, y que está rodeado de Luz. Además, mientras te escucho, tengo la impresión de que tu voz no viene de vuestro acólito, sino que viene de mí mismo, de mi interior. Yo te siento en mí. Esto me trae una gran alegría y, a veces, una voluntad de reír.

         ¡Vamos a terminar siendo un espectáculo humorístico, entonces! [Risas], pero es exactamente eso. Cada vez más, vais a verme sonreír, vais a verme expresarme desde vuestro interior, y no estaréis con alucinaciones. Las palabras que escucháis son verdaderas y no son las vuestras. Es la estricta verdad de la Conciencia.

         Aún estando en ese cuerpo físico, hay suficiente espacio en vuestro pecho y en vuestro Corazón de Eternidad para acoger todos los mundos y toda la Creación, pues el principio de la expresión de la Conciencia, donde quiera que sea, es estar permanentemente en resonancia de información. Cualquiera que sea el vehículo, esto forma parte de la vivencia de todas las demás dimensiones, de la Fuente, del Absoluto y de todas las Conciencias. Y ahora que la Anomalía Primaria ha sido disuelta, la Conciencia ya no está fragmentada, estéis o no en ese cuerpo. Como decías, no me expreso a través de la voz que habla, sino a través de tu interior. Y sois cada vez más los que vivís eso y lo que también pueden vivir todos aquellos que concluyeron la Resurrección y que se pasean por los mundos.

         Os parece todavía como algo maravilloso, milagroso y, para aquellos que no lo viven, como algo imposible, porque no obedece a los moldes de este mundo. Pero ellos también lo van a vivir a partir del momento en que los conceptos y las creencias sobre ser una persona, y sobre el hecho de sentirse en una experiencia en cualquier mundo, sean transmutados en un momento dado.

         Eso es lo que tú expresas. Y cuanto más vastos os volváis, cuanto más acojáis en vosotros mismos al Universo, a la Luz, al Amor, a mí, o también al enemigo, más aumentará vuestro pecho y más libres seréis y más estaréis en la Evidencia, en el Éxtasis, pues os habréis reencontrado.

        
Esto demuestra que esto puede ser vivido a través de este cuerpo. De momento, no todos tienen la posibilidad de viajar en Consciencia Desnuda en vuestro interior, en el interior del Otro o en los mundos. Podéis vivirlo en vosotros, de ahora en adelante, a través de vuestra persona y, si eso pasa, los elementos que pueden quedar a nivel personal, no dudéis que esa vivencia en sí misma pondrá fin a cualquier separación. Y esto sucede instantáneamente.

         El hecho de que viváis que estoy en medio de vuestro pecho y de que el mundo está en vosotros, abre todas las Puertas porque, en ese momento, sólo podéis quedaros en la benevolencia y en el Amor. Volveos vigilantes con lo que sale de vuestra boca, con lo que sale de vuestros pensamientos, de vuestras ideas, de vuestra vista, para que no puedan herir al otro. Aceptad las palabras de Cristo "lo que hacéis al otro, os lo hacéis a vosotros mismos"... eso es válido también para el Amor. Quiero decir que cuanto más tiempo y espacio deis al amor y a los demás, más grandiosos seréis y más estaréis en esa Lucidez. Y eso simplificará más y ocupará más espacio en todas las experiencias, en toda vuestra vida. Literalmente.

Otro testimonio.

         Esta mañana, mientras paseaba en la Naturaleza con otros hermanos y hermanas, de repente sentí que mi cuerpo perdía la consistencia. Era como si se hubiera transformado en pequeños puntos. Y ahora, esta tarde, con los ojos cerrados, es como si hubiera dejado de sentir mi cuerpo, a excepción de un dolor en el tobillo izquierdo que me recuerda que todavía estoy aquí.


         Te agradezco; esto también forma parte de la Resurrección: el cambio de densidad y la irrealidad relacionada con la vivencia en ese mundo se vuelve cada vez más concreta. Y es algo que se vive. Podéis ver bien la diferencia entre lo que se vive y lo que está en el orden del discurso. Hablar de Unidad y de Absoluto es muy fácil, pero es sólo vuestra vivencia concreta la que os libera; no los conceptos ya no más ahora, nunca más.

 

         Es en ese sentido que os habíamos dicho de olvidar las referencias, de presentaros ante el Amor Desnudo. No podéis llevaros nada con vosotros, ninguna historia. Y además, desde el momento en que lo vivís, vivís pertinentemente que todo el argumento y toda historia son densos, contrariamente a la ligereza del Amor Desnudo. Es así como se concluye la finalización de la Resurrección.

 

Otro testimonio.

 

         La pasada semana, durante un encuentro para una alineación, ya no sé cuál ...

         No podrás recordarlo, porque serán cada vez más innumerables. (Risas), y es mejor así. Por otra parte, comprobáis que la trama misma de lo que se celebraba desde hace dos semanas, ya no sabéis más cuándo sucedió, pues todo está uniéndose en el instante presente, aunque esto se haya vivido hace dos semanas. Esto también forma parte del hecho de salir del tiempo.


Y ahora dejo que continúes.

         Mi cuerpo empezó a vibrar extremadamente fuerte y, después, desapareció aunque yo seguía teniendo los contornos. Y al principio sentí una cierta responsabilidad.

        

         Sí, porque estáis en el noble sentido, en la Vida, en la Coronación, en lo Sagrado, en lo inalienable. La responsabilidad es gigantesca pero es ligera al corazón, porque sabéis, incluso sin decidirlo, que en ese momento nunca más os podréis hacer daño o hacer daño a la Vida, aún por ignorancia, porque deja de existir algo que pueda ser ignorado.

        
         Este sentido de lo Sagrado y de la Responsabilidad está directamente relacionado con la Resurrección. Y ves bien y todos pueden ver bien la diferencia, en ese caso, entre los discursos narrativos, las experiencias vibrales y el estado de hoy. ¿Puedes especificar la diferencia esencial? ¿Hay algún elemento que te pueda hacer dudar?



No.

         De tu vivencia, no, es imposible. Tú te reconoces. No fue por casualidad que la Fuente os llevó a firmar el Juramento y la Promesa, tal como Uriel y como los demás. El Juramento y la Promesa sobre un plan cronológico que ya no existe ahora, y que debería haber sido vivido durante el Evento. Pero ahora el Evento sois vosotros mismos. No
. No esperéis nada más.

 

         Fructifiquen este Amor por el Silencio, por la Evidencia, por la Gracia, inmersos en la Naturaleza, inmersos en el Amor con cualquier hermano o hermana que veáis o con quienes os comunicáis a distancia. Y veréis que, muy rápidamente, os convertiréis en el Otro, estaréis en él real y concretamente estando en vosotros. La Conciencia es multilocal y multifocal. Eso antes era imposible pero ahora se ha hecho posible.


         Es por eso que yo os decía de prepararos para lo desconocido, para lo inexplicable, pues ¿cómo quieres explicar lo que vives? Por supuesto, lo traduces por palabras, pero la evidencia es tan grande que no son precisas muchas palabras, que no son precisas justificaciones, porque es evidente. Y todos aquellos que vendrán a decir que es de vuestro ego, no vivieron absolutamente nada y no comprendieron lo que es el Espíritu.

 

         La misma noción de ego está inscrita en el alma colectiva y las religiones han hecho que siempre veáis al ego como algo negativo. La trascendencia del ego no es, en absoluto, el hecho de suprimir la negatividad. Es añadir un toque en la parte superior que viene a disolver la capa que está por debajo.


         Es precisamente eso lo que está en camino a través de la Luz, desde vuestro punto central del Corazón y por vuestro Cuerpo de Eternidad sobre la totalidad de vuestro cuerpo físico. Sí, estáis desapareciendo real y concretamente, pero no podéis anticipar la desaparición. De alguna manera, necesitáis estar sincronizados con todas las Conciencias multi-focales que sólo son una. 


         Y es en este sentido que podéis constatar lo que los Ancianos y yo mismo ya habíamos anunciado, antes incluso del 14 de diciembre: que cuanto más se instalara el caos -sea el caos en la sociedad o incluso problemas de vuestro cuerpo- más os sentiríais en el Amor.


         Agradezco tu testimonio, y podéis ver que todo lo que se ha dicho es sólo el testimonio de la Resurrección, y que aunque pase a través de una vivencia diferente, no tiene nada de personal. De hecho, si ahora realizamos unas Fusiones colectivas planetarias o encuentros planetarios, no duden de que algo ha pasado.

        

         Claro que ya hubo otros encuentros, aunque sean sólo las Bodas Celestiales, como las llamáis. Y ahí estaban todos los Arcángeles, y todas las emanaciones de la Luz, con sus diferentes componentes. Hoy estáis a solas con vosotros, conmigo, con mi acólito, con un hermano o una hermana cuya alma es libre. La Consciencia es Libre, el alma está disuelta y, en definitiva, tal como decía nuestro hermano en todo momento: no hay ninguna diferencia entre un alma y la totalidad de las diferentes Conciencias que están en vuestro Corazón. Es la misma Plenitud.

 

         No es una cuestión de números, de pensar que cuanto más acogen, más densos van a ser, o más pesados. Todo lo contrario. Cuanto más entre en vosotros, cuanto más acojáis la Tierra entera, más alumbrados estaréis desde el interior, en el Amor más total. Cuanto más deis, más recibiréis. Consagrarse a la vida, acoger la Luz, íntegramente. No hay ninguna circunstancia personal que lo impida y aún menos de la sociedad. Y, de todos modos, lo veis bien, donde sea que miréis: las sociedades, cualesquiera que sean, occidentales u orientales, están en decadencia. Mientras ellas se desintegran y van al conflicto porque no hay Amor, vosotros y muchos otros vivís exactamente lo contrario: la Serenidad y el Silencio que os llevan desde ahora, lo queráis o no, a ver este mundo por lo que es.

        
         No hablo de la vida, ni hablo del planeta, sino de la vida que vivís a través de sus estructuras, incluso de las más avanzadas que veis y que os han permitido el confort moderno y la seguridad. Pero, ¿cómo queréis estar fuera de peligro en el seno de cualquier cosa que es falible e imperfecta, que aparece un día y desaparece al otro? Es un simulacro.

        

         Podéis comprobar fácilmente que cuanto más dais de vuestro tiempo, de vuestro espacio, de vuestra acogida, de vuestra sonrisa y de vuestra mirada en Alegría, más recibís. Y ahora eso es inmediato, no se queda para otra vida. Las buenas acciones, como las llaman las religiones, tienen retorno inmediato. No podéis hacerlo de otra manera ni oponeros de ningún modo. Sean lo que sean los hábitos del alma; sean las que sean las reticencias, son barridas de la pantalla de vuestra Conciencia, de la pantalla de vuestra vida y, en definitiva, de la pantalla de este mundo.

 

         A través de vuestra presencia, vivís el final del simulacro, el final de la ilusión y el desvelamiento total del conjunto de las fuerzas que se oponían a la Luz, ya sea dentro de la Conciencia, en sus hábitos, o incluso, tal como sabéis, a través de formas geométricas construidas en esta Tierra. Ahora se acabó.


         No miréis más a este mundo, ni veáis más sus defectos. Eso ya no existe aquí. ¿Qué es más importante, lo que sois o lo que hacéis en este mundo? Incluso si eres madre, ¿eres más sensible a lo que es efímero o a lo que eres en tu verdad? Cada vez más, esta va a ser la única cuestión que va a aparecer en la pantalla de vuestra Conciencia.
        
         Ya no os podréis mentir más a vosotros mismos, ni podréis engañaros a vosotros ni a la Vida. Así es el poder del Amor, así es el poder de la Libertad. Y, a través de los testimonios que van a hacerse cada vez más innumerables, os dais cuenta en definitiva que cuantos más sean vuestros testimonios, más intensos serán, más creíbles, más serán difundidos y actualizados. Y es así como el sueño de este mundo se disuelve; así es como se disuelven los sueños en el seno de este mundo, igual que vuestros miedos, que se disuelven de la misma manera. Es decir, que ya no podréis ser engañados.

 

         Vivís en el Amor y sabéis muy bien que cuando hay esta vivencia, nada os puede engañar en lo que es vivido. En lo que es pensado, sí, mientras el pensamiento no esté completamente impregnado de la Eternidad. Pero eso también se hace muy deprisa. Y cuando digo "muy rápidamente" de ahora en adelante, no es dentro de algunos meses o de algunos años; ni siquiera dentro de semanas. Es cada día y esto va a avanzar inexorablemente.


¿Hay otro testimonio?

Nuestra hermana aún no había terminado ...

¡Ah, está bien, pido disculpas!

¡De hecho ella estaba apenas al principio! (risas). Era sólo el comienzo de su testimonio.
(Continuación del testimonio): ...Sentí mi caja torácica completamente abierta. Era negra y al fondo había una luz efervescente en mi Corazón que ahí estaba y que irradiaba todo mi cuerpo ...


         Es la Consciencia Desnuda a través de la Conciencia de la Eternidad que, por el Corazón del Corazón, emerge en este mundo y viene a resucitar la funcionalidad total de vuestro Cuerpo de Eternidad. Es perfecto, continúa. (Risas)


         ...Me dije a mí misma: "esto es ser el Cristo vivo" y, al mismo tiempo, era completamente consciente de estar allí. Y de repente vi la Tierra llena de corazones como el mío, que ardían por todas partes sobre la Tierra. Vi que eran de otros seres y reconocí a dos hermanas que habían sido absorbidas en mi corazón…

 

Se absorben unos a otros ... (Risas)

         ...Y después de eso había muchos hermanos y hermanas que yo no conocía y que fueron absorbidos por mi corazón...


         Eso es exactamente lo que decía antes de los testimonios. ¿Veis? Y entonces…(Risas)

...Entonces todo se volvió oscuro y totalmente en paz y terminé la sesión en la oscuridad.

         Y hoy, en el estado efímero, ¿sientes alguna diferencia?


Ya no soy la misma.

         Nunca más seréis los mismos. Y si estáis resucitados, incluso vuestra familia tendrá dificultades para reconoceros. Esto es normal que suceda, porque es imposible una Resurrección que no traiga un cambio completo de la persona dentro de este mundo. Hay un antes y un después que se vuelve cada vez más claro. ¿Estás de acuerdo?


         Sí. Por ahora, cambió el hecho de que estoy aquí dispuesta a dar mi testimonio y esto me alegra, pues antes era muy discreta y tenía mucha dificultad para hacerlo de cualquier manera.

 

         Estáis de acuerdo en dar vuestros testimonios cuando estáis vivos y os convertís en el Cristo viviente. Entonces no podéis simplemente quedaros en vuestra esquina en silencio, inmóviles. Sois impulsados ​​a acoger, a testificar y eso se hace naturalmente, por sí solo, espontáneamente. Si hay algo que frena, es vuestra persona la que lo hace, la que cree que la espiritualidad debe ser escondida a los ojos de la vida porque tenéis heridas, o tenéis comportamientos derivados sobre todo de otras vidas en las que hubo golpes espirituales relacionados con religiones o con cualquier otra cosa. Todo esto está saliendo y limpiándose. Y podéis comprobar que lo que pasa ahora no tiene ninguna comparación, que es totalmente diferente, aunque la persona esté todavía en su cuerpo físico.

        

         El miedo a la muerte dejó de existir. El único miedo que puede aún manifestarse es el miedo al sufrimiento, ya que su vehículo físico, por supuesto, es falible. Pero eso es normal mientras estéis en este vehículo y no es necesario allí mezclar nada de espiritual después. Estáis realmente Libres de la persona, de la historia y de la Conciencia misma, y aunque todavía no salisteis, ya podéis decir: "Todo está cumplido". Sólo queda vivir, componer con lo que se da en este mundo, si así lo puedo decir, y acoger, acoger, acoger. Es todo.

         Está claro que cuando vivís eso al principio, como dices, antes de las experiencias, ella se callaba, y hoy salen espontáneamente. Aunque hay alguna reticencia respecto a los condicionamientos de las almas colectivas, en relación al ego colectivo, ya no estáis sometidos más a eso; ni a la mirada del otro, ni a vuestros juicios. El amor es realmente lo que sois. Como decía el Comandante, el Amor está delante, detrás, a la izquierda, a la derecha, arriba y abajo.

         ¿Qué puede permanecer como una ilusión con relación a este mundo, a vuestra persona desde el momento en el que, real y concretamente, habéis acogido en vosotros un alma y otras Conciencias?

         ¿Ya terminaste? (Risas).

 

         ...He olvidado una cosa: en un momento dado, antes de ser absorbida en la oscuridad, vi un gran agujero y pensé que era el agujero de la ionosfera y que yo estaba siendo aspirada dentro de él.


         Puede pasar, pero es una de las correspondencias de los canales aislantes, claro, y ahí no hay más velo, es un agujero. Yo te agradezco. Gracias.


¿Hay otro testimonio? Entonces, un último testimonio antes del final del tiempo designado ...


¿Ya? (Risas)

¡Así es la ultra temporalidad en este mundo!


         Esto sucedió tres días antes de la Pascua. No podía dormir porque el observador había estado observando durante todo el día y no podía dormir. Entonces, una voz me dijo: "en otros tiempos llamabas a Ma para ayudarte a alinearte". Y otra voz respondió: "sí, pero ahora ya no es lo mismo, eso ya no funciona".

 

         Sin embargo, inmediatamente una fuerza apareció delante de mí. Era casi tangible y palpable y penetró al nivel de mi pecho, en el corazón y entonces mi Conciencia supo inmediatamente que yo era Ma en su totalidad, era la Vastedad, era la Alegría Infinita, era una sonrisa desdoblada hasta el infinito. Me quedé así por un momento y luego salí y dormí y a la mañana siguiente tuve dificultad en saber quién estaba en este mundo y en reconocer mi cuarto.

 

         Agradezco tu testimonio. Como dices, las dos voces que has escuchado no son una disociación o esquizofrenia, sino que son realmente dos voces que están presentes en ti. Por un lado, está el ego que es oído en lo que queda de él; no puede quedarse silencioso. Lo escucháis hablar. Y del otro lado está el niño interior. Y por supuesto que el ego no quiere que hagas ese tipo de experiencia; lo que prueba en sí mismo que tú no eras ni el ego ni el niño interior. Tú eras el testigo y el observador y, como observador, sí, el Ego, el Amor, la Luz, el Alma de los Otros, la Conciencia de los Otros, la piedra, el río, todos hablan contigo. E incluso los grandes arquetipos, las Estrellas que están en stase pueden estar delante de ti, no para comunicar con palabras -eso ya no sirve para nada- sino para vivir que tú eres ellas. De la misma forma que un alma puede entrar en ti, pero no puede haber identificación o apropiación. No pienses que ahora eres Ma o una Madre Divina. Entonces no hay ningún problema. (Risas)

Entonces, ya es el momento de hacer una pausa.


¡¡Todavía faltan cinco minutos!!.

Un último.

         Es un testimonio parecido al de nuestra hermana que absorbió todas las Conciencias:

"No recuerdo si fue esta mañana o la noche pasada, pero me puse en la posición de acogida, diciendo que acogía en mí todo, todo, todo, absolutamente todo. Me atravesaron algunos pensamientos y me dije: los acojo y los colocó en el Corazón. Entonces, el Corazón del Corazón se transformó en un vórtice con muchas emanaciones, sin saber si eran pensamientos o qué, que entraban en el Corazón. Y me dije: acojo, acojo, y mi corazón va a transmutar todo lo que necesita ser transmutado. A continuación, creo que me fui...


         Lo que describes es esta noción de Acogida, de acoger, que se trata de una postura de la Conciencia. O colocas el Acogimiento en la frente, o colocas en la frente lo que sientes o el intelecto. La acogida incondicional no puede ir acompañada por la mente ni por ninguna otra cosa. La Acogida debe estar Desnuda; es una Rendición incondicional que ahora es simultánea con el sacrificio.


         Gracias por tu testimonio y ahora va siendo tiempo de dejaros descansar. Por mi parte, volveré con mi acólito para una Sintonía Planetaria y también para nuestra segunda cita, más adelante en la semana. Y allí estaré también con mi acólito y con aquellos que quieran unirse a nosotros si sois libres, en Conciencia.

Bidi os saluda y Bidi no os deja nunca.
(Risas)

Gracias Bidi ¡Hasta pronto!


Transcripciones: Naty, Yoma y Louis. Traducciones: Félix, María, Camelia y Nair. Revisión y coordinación: Laura.

Para el mundo, con amor.